El incremento del Delito Organizado es una amenaza para la democracia

Los venezolanos perciben que los cuerpos de seguridad del Estado, en lugar de combatir, propician la existencia y operatividad del Delito Organizado. El 66% de los entrevistados consideró que son los policías y los militares quienes le venden armas al Delito Organizado.
Las tres actividades más comunes a nivel nacional son: tráfico de drogas, contrabando de productos y robo y venta de vehículos y repuestos. En promedio, aproximadamente por cada 3 entrevistados que dijeron que el tráfico de drogas está “muy presente” en el país, 1 entrevistado señaló que está “nada presente”.
El Observatorio de Delito Organizado y el Laboratorio de Ciencias Sociales (LACSO) se complacen en presentar el II informe del observatorio de delito organizado, realizado a partir de los “Resultados de la 2ª Encuesta de Delito Organizado en Venezuela”, estudio realizado en 7 regiones del territorio nacional en el período de julio y agosto del presente año 2015.
Más allá de la mera divulgación de los resultados de nuestras investigaciones, consideramos de extrema importancia, informar en alguna manera al ciudadano sobre la naturaleza de estos delitos y cómo no ser parte de ellos ni víctimas de estos en particular.
Es bajo esta perspectiva que hemos realizado la segunda edición de la “Encuesta sobre Delito Organizado en Venezuela”. La primera en 2013 y la segunda en julio y agosto de 2015, ambas difundidas a nivel masivo y publicadas en completos informes.
Como se refleja en las páginas de esta publicación, más de la mitad de los venezolanos considera que el incremento del Delito Organizado es una amenaza para la democracia, y más aún en esta época donde percibimos su presencia en gran parte de nuestra vida diaria.
A continuación algunos resultados relevantes de este estudio:
Las tres actividades más comunes a nivel nacional son: tráfico de drogas, contrabando de productos, robo y venta de vehículos y repuestos.
Pandillas, mafias y bandas, junto a pranes y colectivos armados, son los grupos que se consideran causantes del Delito Organizado. Por cada 3 personas que señalaron que la actividad de las pandillas, mafias y bandas son causantes del Delito Organizado, 1 persona dijo lo contrario.
El 66% de los entrevistados consideró que son los policías y los militares quienes le venden armas al Delito Organizado.
Más de la mitad de los entrevistados manifiestan temor a la denuncia y a cooperar con los cuerpos policiales y el sistema judicial.
La mitad de los entrevistados a nivel nacional, en los últimos 12 meses, ha sido víctima de robo o hurto.
El 64% de los entrevistados considera que, en su comunidad, es fácil o muy fácil conseguir drogas. Esta percepción ha aumentado poco entre 2013 y 2015 en 3 puntos porcentuales.
Los entrevistados consideran que la inseguridad personal ha empeorado en el país en los últimos doce meses. Así lo percibe el 76% de los encuestados.
Los actores identificados como responsables del Delito Organizado fueron las pandillas, mafias y bandas, los pranes de las cárceles y los colectivos. Hubo poca atribución a los paramilitares y la guerrilla. Una mayoría importante de la población consideró que los militares habías sido corrompidos por el narcotráfico.
La población considera que se debe combatir al Delito Organizado con la aplicación de la ley y no negociar con los delincuentes o las zonas de paz.
La gran mayoría de la población, en todo el país y de todos los sectores sociales o políticos, considera que el incremento del Delito Organizado es una amenaza para la democracia.
 
 
Fuente: observatoriodot.org.ve