Cartilla antibomba

La siguiente guía proporciona algunasindicaciones de comportamiento antes, durante y después de un acto terroristasorpresivo. Se trata de prepararse yprotegerse frente al riesgo que tiene este tipo de actos. Fue diseñada con base en investigaciones depsicología del desastre, atención de emergencias y la revisión práctica de estetipo de experiencias. Su conocimiento yaplicación contribuirá a salvar vidas. Aunque este tipo de actos no se ciñen aun patrón, se intenta con esta guía tratar de difundir diferentes experienciasy conclusiones, para tener unas bases que contribuyan a una mejor actuación con el fin último depreservar la vida de las personas que se vean involucradas, por eso lesugerimos seguir los siguientes consejos:

1. Esté alerta. Siga las indicaciones de las autoridadespara detectar riesgos e informe inmediatamente sobre las situacionessospechosas (cualquier situación sospechosa) dando información concreta ydetallada. No se trata de andar con losnervios de punta todo el día ni de desconfiar de todo el mundo, sino deobservar permanentemente el sitio, las personas y las cosas que le rodean ysaber qué está pasando y qué puede pasar. Preste atención a lo que se sale de la normalidad o de la rutina en suárea de desempeño, calle, oficina, edificio, acera, casa, metro, parque,restaurante, café, personas, etc.

2. Organice y prevenga. En su lugar de trabajo, estudio, recreacióny habitación, hable con sus familiares, compañeros y vecinos y propicie medidaspreventivas. Usted se deberá hacer lassiguientes preguntas: ¿Cómo evitar odisminuir los riesgos?, ¿qué hacer?, ¿cómo responder (actuar) ante unaemergencia?. Revise en grupo eledificio y sus alrededores, y descubra los lugares y los objetos que puedensignificar peligro. Corríjalos oefectúe un pequeño inventario de ellos. Establezca acciones y responsabilidadesconcretas. En otras palabras, diseñe yaplique un plan de contingencia contra actos terroristas sencillo, viable(desde el punto de vista técnico – económico) y práctico. Prepare un botiquín de primeros auxilios. Asesórese con la policía, los bomberos, losgrupos y organizaciones de rescate, Defensa Civil y las entidades privadasespecializadas de gestión del riesgo o vigilancia. Dedíquele tiempo y unpresupuesto (comedido). Con todo, la seguridad le resultará menos costosa querecuperarse después del impacto.

3. Practique el plan de contingencia.Mejórelo, enriquézcalo con la colaboración activa de todos. ¿Cómo va a protegerel personal?, ¿Quiénes necesitanatención especial (niños, ancianos, mujeres embarazadas, personasdiscapacitadas)?, ¿Cómo y a dónde va allevar los heridos, cómo va a enfrentar las consecuencias de un atentado ocualquier otra situación de peligro?. El organizarse previamente y practicar el plan de vez en cuando le daventajas individuales y claramente puede significar salvar su vida y la de susallegados, así como reducir pérdidas en sus bienes. En lo personal, llevesiempre consigo sus documentos de identidad, información médica, grupo y factorRH sanguíneo, alergias, nombres y teléfonos de allegados. Recuerde definir ydemarcar rutas de evacuación y escape, zonas seguras, helipuntos, etc.

4. Una alerta temprana, Usted es el único quepuede dar la alarma, si observa algo fuera de lo común, como una ligera columnade humo tipo cigarrillo dentro de un vehículo cerrado, ver un vehículo bajo delos amortiguadores traseros, lo cual indica que está cargado, observar a unapersona que estaciona un vehículo y sale corriendo o se monta rápidamente enotro, observar si en un restaurante alguien deja olvidado un maletín (no lotoque, informe al dueño del lugar), en fin, usted puede hacer la diferencia consolo estar alerta.

5. Si la explosión es inminente,no corra, no camine de pie, no importa donde este arrójese de inmediato al pisoboca abajo, si puede arrástrese alejándose del objeto sospechoso o moviéndosehacia un lugar seguro próximo, cara al suelo, piernas juntas y los piesigualmente tocando el piso con la punta y manteniendo los mismos con unainclinación ascendente, el brazo derecho debe pasar sobre la cabeza y tapar eloído Izquierdo con la mano, el brazo izquierdo debe pasar frente a la frente ycon la mano tapar el oído derecho, mantenga la cabeza recta mirando el piso ylo más importante, abra la boca, cierre los ojos (es una técnica deautoprotección, el estar lo más pegado al piso evita daños mayores, la ondaexplosiva ingresará por los pies y subirá por éstos, podemos decir que secomporta como si fuera un fluido (es aire a presión), igualmente es posible quepenetre por el ano y por ello la boca debe estar abierta). Igualmentedependiendo del explosivo utilizado y la cantidad, el tipo de daños y lesionespuede variar, recordemos que generalmente en las cercanías de la explosión seproduce una alta temperatura que origina incendios post-impacto.

6. Si es una alerta de bomba, aléjese rápidopero en calma del lugar, sin sobresaltos, alerte pausadamente a sus compañerosy trate de cumplir el plan establecido y de aviso a los cuerpos de seguridad,esto si le es posible, procure abrir puertas y ventanas, cortar los serviciosde gas, luz, etc, tome toda alerta o llamada de aviso de bomba como cierto yactúe en consecuencia, sea esta dada por un anónimo o un ente oficial. No se acerque al artefacto sospechoso porningún motivo. Si la explosión losorprende durante la evacuación, inmediatamente póngase a salvo de la caída deescombros, tírese al piso y proteja su cabeza (ofrezca la menor superficie desu cuerpo y cabeza a las esquirlas y los trozos de metal y material expulsado),ubique un dispositivo contra incendios y este alerta para usarlo. De ser posible, recuerde los lugaresescogidos en el plan para protegerse y cúbrase de la caída de vidrios yobjetos. Sepárese de ventanales,cornisas y elementos inestables o colgantes.

7. Ante todo, cálmese. Suena difícil, pero la situación ya es muydura para empeorarla con gritos, pánico, carreras y descontrol, que soncontagiosos si usted les da la oportunidad. Déjelos para las películas y las telenovelas. Aplique el plan de contingencia.

8. Evalúe la situación. ¿Cómo están usted y las demás personas?,¿Qué está pasando a su alrededor?. Pase lista. Si hay heridos trate de detenerlas hemorragias aplicando un apósito (pañuelo, gasa o tela limpia), sin tocardirectamente la sangre del paciente; igualmente, si la persona no respira tratede despejar su boca de objetos y, póngale la cabeza de lado (muévalo muylentamente), la no respiración y las hemorragias son lo más grave y debe en loposible tratar de hacer algo como lo indicado. Si usted no está entrenado en primeros auxilios, no mueva a personas queno puedan hacerlo por sí mismas, ni permita que inexpertos lo hagan a menos queel paciente esté corriendo un peligro real e inmediato (un incendio,etc.). No de líquidos ni alimentos apersonas que no
estén plenamente concientes. Mejor, aprenda desde hoy primeros auxilios, que le van a servir toda lavida y en cualquier momento.

9. Una vez completo el personal yeliminados los peligros eléctricos, de gas, agua y otros elementos de riesgo,evacúe el lugar en orden hacia el punto de reunión interior o exterior. Sialguien no puede ser movilizado déjelo en compañía de una persona serena ysegura y avise al personal de Bomberos, rescatistas, paramédicos, policías,etc., describiendo claramente la situación. No corra. No grite. Respire profundo y lento. Camine despacio, es más seguro. Deje una nota en la entrada, avisando si ya no hay personas adentro, notranque las puertas, no fume ni encienda fuego, cuidado con las fugas de gas yencender la luz, procure tener linternas selladas antichispas en su botiquín deemergencia.

10. Aunque es posible que haya robos y saqueos,la gente suele ser más solidaria y honrada en estas situaciones, pero estesiempre alerta, la conducta humana puede cambiar. Recuerde que debe organizarsepreviamente con la comunidad para atender emergencias, garantizando que elcontrol lo mantengan personas conocidas, sin gritos ni conflictos deautoridad. Si usted conserva la calma,es más probable que los demás también lo hagan y la respuesta resulte máseficiente. Si su comunidad cuenta con su frente de seguridad ciudadana o grupode auto vigilancia, es bastante menos probable que sufra estos actos, o que losdelincuentes se aprovechen de ellos.

11. Siga las instrucciones de las autoridades y el personal de atención deemergencias. Notome iniciativas arriesgadas por sí mismo. Si está cargando un herido no corra, si lo hace lo va a maltratar yperjudicar más. Haga que esté cómodo ytranquilo mientras lo recogen y durante el desplazamiento al centro de atenciónmédica y evite comentarios que lo afecten más.

12. Si no puede controlar los nervios u obedecer las instrucciones, avise a sus allegados y retírese: es una forma muy útil de ayudar. No hable de lo que cree que pasó o va a pasar, sino de lo que a usted leconsta que sucedió; no propague rumores infundados que deterioran todavía másla salud mental de una comunidad. Use el teléfono solo para lo estrictamentenecesario, ya que las líneas se necesitan para comunicaciones urgentes. No congestione el lugar del atentado (talvez hay más bombas), las vías ni los hospitales. Permita que las autoridades hagan su trabajo y que el tránsitopueda fluir.

13. Lo más pronto posible, de a los cuerpos deseguridad la información pertinente que usted posea. La responsabilidad también es suya y al fin y al cabo su vida yla de sus seres queridos también están en juego.

14. Si es necesario remitir a un allegado a un hospital, infórmese de quién lo transporta y a cuál lugar lo llevará. Si es posible, acompáñelo (una solapersona). Cálmese antes de llamar a lafamilia. Usted mismo repórtese a susparientes, ocupando el teléfono el menor tiempo posible.

15. La prensa tiende a exagerarhablando de pánico, descontrol, escenas dantescas y sangre. Casi siempre los periodistas gritan, repiteno recitan expresiones comunes, incurriendo en muchas precipitaciones,inexactitudes y especulaciones (por supuesto hay sus excepciones que ustedconoce bien, el periodista puede ser su aliado). No crea todo lo que dicen, porque ellos no son expertos endesastres y también están asustados y además obligados a decir cualquier cosamientras están al aire. Algo tiene queocurrírseles. A pesar de que parte delo que dicen puede ser cierto, a veces la realidad es otra, menos dramática. El pánico existe, pero no tiene quepresentarse siempre.

16. Si usted cree tener un familiar afectado,por favor no converja a la escena del atentado, pues congestionaría las vías ycontribuiría con su presencia a entorpecer las labores, si no puede evitardesplazarse procure guardar una distancia prudente y lejana de la zona de laemergencia, llegue caminando, por favor no lo haga en vehículos que luego nosabrá donde estacionar.

17. Después del atentado y en otro lugar,desahóguese, llore si necesita hacerlo, hable con su familia y amigos. Aunque no haya sido herido es bueno que sehaga una revisión médica y psicológica. Atención: los niños expuestos alevento la requieren necesariamente. Si por desgracia ha perdido un familiarbusque ayuda, serénese en este momento que más necesitan de usted, recuerde queseguirá un proceso muy duro, no dude en desahogarse pero hágalo reservadamente,no dude en buscar ayuda psicológica, no es un pecado expresar los sentimientos,calma, mucha calma y fe en sus creencias.

18. Estudie este documento, reprodúzcalo,cuélguelo en un lugar visible junto con el plan de emergencia, discútalo conlas personas cercanas. Léaloperiódicamente, asúmalo y practíquelo. No se permita pasarlos por alto, ya que le están dando la oportunidad dereducir su indefensión ante la cobardía y la estupidez ajenas.

Porfavor, organícese y prevenga antes de que la realidad lo atropelle; es su mejorherramienta para protegerse y actuar con calma e inteligencia. Esta pesadilla nos sirve también para quetomemos mejor control sobre nuestras vidas y nos preparemos para prevenir otrasemergencias (naturales o provocadas) y dejar de sorprendernos cada vez que algosucede. Por último, nuestra reacción frente a estos hechos suele ser la deencerrarnos, desconfiar de todo y de todos y defendernos aislándonos los unosde los otros. Eso precisamente es lo que necesita el criminal para ejecutar subarbarie y atacarnos individualmente, cuando estamos más débiles. Por elcontrario, crisis nos obligan a agruparnos, a desafiar la indiferencia urbana,a apoyarnos de formas concretas y cuidarnos las espaldas mutuamente. Así es másdifícil que nos agredan y nos acercamos a la seguridad que parece tan lejana.

Nota: este documento fueelaborado por el autor y Engels Cortés, representante de la fundación Gestiónde Riesgo de Colombia.

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