El problema de la seguridad papal

Al haber transcurrido yacinco años de la segunda visita de su Santidad Juan Pablo II a nuestro país yaprovechando la oportunidad que me brinda Segured.com, me parece importantehacer algunas reflexiones sobre lo implícito, en aquel entonces, en la seguridad de tan augusto personaje.

El Papa Viajero, comoalgunos le dicen, acostumbra a mezclarse con la multitud, a abrazar a losfeligreses y hasta a salirse del protocolo para saludar a un viejo amigo. Es elprimer Papa moderno en otorgar audiencias regulares en la tumultuosa plaza deSan Pedro, lugar en que fue objeto del atentado perpetrado por Mehmet Ali Agca,y en el que insistía en pasear en un Fíat descapotado llamado desde aquelentonces “Papamóvil”. En innumerables oportunidades sus asesores le hansuplicado tomar precauciones. El ha sido renuente. Un arzobispo dijo: “El Papacasi no toma medidas de seguridad por que el representa a los débiles y tieneque ir a encontrarse con ellos. Es normal que no quiera protección”. Esto haceque la tarea de brindar seguridad a semejante personalidad no sea nadasencilla.

Si pudiésemos verificar lasestadísticas del Vaticano comprobaríamos que el componente de seguridad física,constituido por la Guardia Suiza, la Policía Italiana y la Oficina Central deVigilancia, además de los refuerzos locales de los países que visita, representanporcentualmente, cuando mucho entre un 5% a un 10% del éxito de la seguridadPapal. El resto, es decir, 90% a 95% lo proporcionan las diversas unidades deinteligencia religiosas, laicas y en algunas pocas excepciones las de lospaíses visitados. Han transcurrido 1017 años desde la última vez que un Papafue asesinado: Juan XIV. En 1970 un fanático boliviano, en Manila, atacó alPapa Pablo VI con una daga, hiriéndolo en una mano. En 1979 dos miembros de laGuardia Suiza redujeron a un hombre perturbado que trató de penetrar en elVaticano esgrimiendo un cuchillo y gritando que quería matar al Santo Padre. Enfebrero de 1981 una bomba explotó en el estadio de Pakistán justo antes quellegara Juan Pablo II para oficiar una misa. Han ocurrido algunos otrosincidentes de menos resonancia pública, sin embargo, tomando en cuenta, elperfil y la importancia de la investidura Pontificia, podemos asegurar queestos hechos aislados confirman que los Servicios de Inteligencia de quedispone el Vaticano, tanto religiosos como laicos, han tenido una eficiencianotable.

A manera de informaciónpodemos decir sobre la Guardia Suiza que es una unidad de protección yceremonial, establecida en 1506, cuya misión es la protección física del Papa ydel Vaticano. Consta de unos 200 hombres, que tradicionalmente visten ununiforme rojo, amarillo y azul, que según dicen, diseñó el mismo Miguel Ángel ycomo arma portan la alabarda, combinación de lanza larga, hacha de combate ypica, tradicional de tiempos mas aguerridos. En esa segunda visita Papal,contamos con la presencia del, para aquel entonces, Mayor Alois Estermann y delSargento Werner Sieber, en representación de la Guardia Suiza.

Aunque el Vaticano es unestado independiente, el Gobierno Italiano provee una fuerza de seguridad decerca de 100 policías para patrullar la plaza de San Pedro y su jurisdicciónllega hasta las escaleras de la basílica.

También existe la OficinaCentral de Vigilancia, conocida en la comunidad de seguridad como la “LaVigilanza” que esta formada por mas de 150 guardaespaldas, incluyendo un ObispoProtector Personal del Papa. Por la “Vigilanza” acompañaron al Santo Padre, suDirector el Comisionado Camilo Cibin, y los oficiales del cuerpo, GianfilippoAnbini, Gianfranco Maritan, Egildo Biocca y Nuncio Bracchi.

Que podemos decir de losomniscientes y omnipresentes Servicios de Inteligencia del Vaticano? …que sonquizá, los mas antiguos, eficaces y discretos del mundo…

En la mencionada visita, elresponsable de la coordinación de la seguridad Papal por Venezuela fue elGeneral de División del Ejército Wilfredo Guerrero Zerpa, Director GeneralSectorial de Inteligencia Militar a la sazón. Mas de 20.000 funcionarios de lasFuerzas Armadas Nacionales, y las diversas policías formaron parte del operativobajo su mando. El General Guerrero Zerpa también fue el responsable delcomponente de inteligencia de la seguridad Papal. Se construyó una versión venezolanadel “Papamóvil” con el nivel mas alto de blindaje (VI/V). En resumen, huboalgunas detenciones preventivas, y el operativo fue un completo éxito.

Personalmente, a Juan PabloII le impacienta todo este esfuerzo, y en mas de una oportunidad ha expresado:“Dios Mío!!! esto es inconcebible”. Cuando en 1979, Mehmet Ali Agca, amenazócon asesinarlo en Turquía, el Papa comentó con un amigo; “No tengo miedo, esto es lo que podría llamarse “losriesgos del trabajo”. Estamos en las manos de Dios y el amor es mas fuerte queel odio…”.

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