Negociación con los padres

¿Qué hago para que mispadres me dejen salir a celebrar después de las 12 con mis amigos el 24 y el31? Estoy totalmente fastidiado con eso de que todo es un peligro, que si losrobos, los asaltos y los accidentes de tránsito. ¿Es que nunca fueron jóvenes yno entienden que sus planes son aburridísimos?

Por supuesto se que no sirve de mucho que tediga que no eres el único ni el último adolescente que pasa por esto, pero esasi.

De acuerdo a tu planteamiento creo que estamoshablando de un proceso de negociacióncuyo objetivo específico es lograr expandir tus horarios de salida o de «toque de queda», independientede la época del ano. De ser asívaldría la pena repasar algunas reglas básicas de este proceso.

Regla # 1 para una negociación exitosa: conoce a tu oponente.

Conocerlos te permite entender la forma en quepiensan y de esa forma quizás tengas mejor oportunidad de lograr tu objetivo.

La percepcion de muchas de las «víctimas»de estos pseudoenemigos -llamémoslos padres o representantes- es que ellostienen el poder de imponerles normas y reglas (muchas veces tan absurdas comolimitar su vidad social a través de estrictos horarios de salida) por el simplehecho de haberlas traído al mundo, criado y continuar haciéndolo todavia, enotras palabras las mantienen. Esto de alguna manera les hace pensar – o almenos eso parece por la forma en que muchas veces actúan  – que son sus dueños hasta el momento quetengan la mayoría de edad.

Quienes manejan este tipo de conceptolamentablemente están en desventaja desde antes de comenzar la negociacion yaque lo que plantean es una lucha con un enemigo irracional con quien cualquierintento seria una pérdida de tiempo.

Una alternativa interesante sería considerar quea pesar de lo que aparentan, estas personas tiene algún tipo de vínculoafectivo hacia tí,  casi que me atreveríaa decir que te quieren. De que otra manera como podrías explicar que pierdantiempo y energía tratando de reforzar una serie de parámetros en casa; queaunque parezcan destinados exclusivamente a fastidiarte, son su forma particularde expresar su preocupacón por tí (y la útima vez que revise, esto significacariño, solo que a veces esta muy bien disfrazado).

 

Al mismo tiempo -si esto es cierto- no existepapá o mamá en el mundo que no tenga consistentemente una serie de miedos yfantasías en relación a lo que les puede pasar a sus cachorros una vez fueradel alcance de la proteccion que ellos ofrecen. Miedos que en oportunidades sonalgo exagerados pero que en otras no lo son tanto, especialmente cuandoconsideramos la relidad desde el punto de vista de inseguridad que vivimosactualmente. Esto no quiere decir que no confien en tí (algunos de verdad no lohacen e incluso algunos tienes razon), quiere decir que existe en todos ellosun pensamiento, casi mágico, que a pesar de lo intelegentes-educados y vivosque sean algo siempre les puede pasar y los responsables a fin de cuentas seranellos (eso sin hablar del dolor que significaria una pérdida de esta magnitud).

Por lo tanto lejos de ser un enemigo irracional,a quien te enfrentas es un oponente con una inversión afectiva real en ti quepudiera oir planteamientos racionales si sabes como hacerlos.

Es aquí donde utilizamos la Regla # 2 de unanegociación exitosa: conocer lo quequieres y tratar de logralo entendiendo las necesidades del otro.

Quiere decir que si tu tienes claras cuales sontus necesidades y planificas estrategias de negociación acordes a tusexpectaivas pero emarcadas en las preocupaciones de ellos, quizás tengas unamejor oportunidad de obtener lo que buscas. Si deseas prolongar tus horarios desalida que elementos podrías utilizar para intentar una negociaciónfavorablemente con a tus padres:

Debes negociar con ellos, no como un adulto, nicomo un nino: como un adolescente. Como un adolescente con necesidadesespecificas, necesidades de vida social que te permita satisfacer tu necesidadde pertenencia a grupos de pares, crecer como individuo, de compartir  y divertirte con personas y actividadesacordes a tu edad; y que algunas de estas necesidades pueden variar en lamedida que vamos madurando y los tiempos van cambiando (incluso en algunasoportunidades no hace daño extenderte en detalles sobre la actividad en cuestiónya que asi limitas las fantasías y con ella sus miedos).

 

De esta forma justificas racionalmente lapotencial ampliación de horarios

*Nota1: no seria dañino traer a la mesaelementos adicionales como desempeno académico, comportamiento en casa,cumplimiento previo de normativas de salida, etc.).

Debes anticipar todas las posibles estrategiaspara tratar de garantizar la seguridad tanto tuya como de tus pares yofrecerles un plan previamente concebido (localización del sitio donde estarás,forma de contactar este sitio y a los adultos supervisores del mismo, asegurarcontacto frecuente con tus padres a horarios predeterminados, planes decontingencia -qué hacer en caso de una emergencia-, etc).

 

*Nota2: ni por un segundo se te ocurra mencionar»que nunca fueron jóvenes» o «planes aburridísimos», ya queson causa  de suspensión inmediata de lanegociación.

Al hacer esto les das sensación de anticipacióny con ello la percepción de tu propia consciencia de riesgo que al final setraduce en un nivel de madurez para muchos inesperado.

De esta forma les manifiestas que entiendes susmiedos y que comprendes la preocupación que sienten cuando se plantean cosasque podrían profundizarlos.

No obstante debes estar preparado para laposibilidad de negociaciones solo parcialmente exitosas para tí al menos enapariencia. No te sientas frustado si siendo este tu primer intento no sea tanefectivo como esperabas y no obtengas toda la amplitud de horarios y libertadde movilización que imaginaste. A veces el simple hecho de lograr la negociaciónpropiamente dicha es un éxito en si misma. Pero si en esta oportunidad lograsalgun tipo de modifiación de tu normativa de salidas -por muy leve que teparezca-vas por el camino adecuado y te aseguro que es solo cuestión de tiempoy práctica antes que te sorprendas con los resultados.

Creo que el trovador de los 70’s Bob Dylan loexpresa mejor cuando dice: «Nosiempre ob
tienes lo que quieres, pero si lo que necesitas», y yoagregaría, si eres un negociador inteligente y creativo la posibilidad deobtener lo que de verdad quieres esta más cerca de lo que imaginas.

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