Una huelga de transporte público paralizó totalmente a la ciudad de La Paz desde las primeras horas de este miércoles.
Los conductores de vehículos de transporte exigen que el gobierno congele por el lapso de un año el precio de los combustibles.
El paro ha sido apoyado por bloqueos de calles en numerosos lugares en toda la ciudad, donde los buses que habitualmente transportan a la población han sido utilizados para establecer barricadas.
Esto ha impedido que puedan circular los vehículos particulares, y por lo tanto es prácticamente imposible el desplazamiento de los ciudadanos.
A primeras horas de la mañana, el portavoz del gobierno, Osvaldo Candia, indicó que se otorgará tolerancia a las personas que lleguen retrasadas a sus labores habituales en empresas públicas o privadas.
Las clases en algunos colegios privados han sido suspendidas, pero el gobierno no se ha pronunciado respecto a las actividades de los establecimientos de educación pública.
Aumento de precios
Mesa ha llevado una política de resolución de conflictos ante la huelga.
Este paro de transporte se suma a una huelga de hambre que desde hace seis días mantienen dirigentes del gremio de los transportistas, con el fin de presionar al gobierno del presidente Carlos Mesa para que congele el precio de los combustibles.
Mientras los conductores de transporte público quieren que los precios no se modifiquen por un año, el gobierno ha señalado que esa medida no podrá aplicarse por más de dos meses.
En los últimos meses, los precios del combustible para vehículos han subido en varios centavos, lo cual había provocado reclamos pero, hasta ahora, ninguna medida de presión tan amplia como esta huelga de transporte.
No han ocurrido incidentes violentos, a pesar de los bloqueos que se extienden por La Paz y la vecina ciudad de El Alto, que entre ambas tienen aproximadamente un millón y medio de habitantes.
Desde que asumió el mando en octubre pasado, el presidente Mesa ha llevado a cabo una política de resolución de conflictos basada en el diálogo, y hasta ahora no ha tenido que recurrir a la represión.