Associated Press
BUENOS AIRES – La justicia argentina dejó en libertad el lunes a Carlos Juárez, el octogenario caudillo provincial del peronismo y ex gobernador de la provincia de Santiago del Estero, quien fue detenido por la desaparición de opositores en la década de 1970.
La medida fue dispuesta por el Tribunal Oral Federal de esa provincia, ubicada a unos 1.152 kilómetros al norte de Buenos Aires.
Juárez, cinco veces gobernador de Santiago, se encontraba bajo prisión domiciliaria desde abril a raíz de una denuncia que lo vinculaba a la desaparición de al menos una docena de personas entre 1973 y 1976.
Uno de esos casos sería el de un concejal, Emilio Abdala, que habría sido detenido en la propia casa de gobierno santiagueña.
Si bien la justicia hizo lugar a una presentación de su defensa para «excarcelarlo», Juárez continuará imputado en la causa.
«No está resuelta la decisión de fondo, que se resolverá a medida que se vayan incorporando elementos de prueba, pero hasta ahora no hay ninguno», dijo a una radio local el abogado defensor del ex gobernador, José Antonio Azar.
«La justicia federal sigue siendo un bolsón de impunidad», dijo por su parte el abogado Antenor Ferreyra, que representa a la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Santiago del Estero.
Juárez, quien asumió por primera vez como gobernador provincial en 1949, fundó una auténtica dinastía en Santiago del Estero, sólo interrumpida por los gobiernos militares.
Hace dos años, cedió la gobernación a su segunda esposa, Mercedes Aragonés de Juárez.
Aragonés fue removida en abril de este año cuando el Poder Ejecutivo decidió intervenir la provincia ante las denuncias de corrupción y otros delitos que se le imputan en su gestión, que son investigados por la justicia.
