Cuando recibas la orden de evacuación tienes que tener todo listo en tu casa para partir con tu familia al refugio más cercano. Entérate qué pasos seguir para cuidar tu propiedad y poner a resguardo tu familia. No hay tiempo que perder.
Antes de la evacuación
Los expertos de FEMA te recomiendan:
Si las autoridades ordenan la evacuación, házlo lo más pronto posible. Evita las carreteras inundadas y ten cuidado con los puentes que pudieran estar destruidos.
Asegura tu casa.
Desenchufa los enseres, desconecta la electricidad y cierra la toma de agua principal.
Si el tiempo lo permite, lleva los muebles a un piso más alto para protegerlos de la inundación. O colócalos a un nivel superior del suelo.
Llévate los víveres y suministros pre
ensamblados para emergencias y una muda de ropa para cada miembro de la familia, para que se mantengan calientes y protegidos.
Después del ciclón
Vuelve a tu casa sólo cuando las autoridades te indiquen que es seguro.
Ten cuidado con las líneas de electricidad caídas o que estén sueltas.
Avísale a la compañía de energía eléctrica, la policía o al departamento de bomberos.
Entra a tu casa con precaución. Abre las ventanas y las puertas para ventilar o secar la casa.
Verifica que no haya filtraciones de gas. Si percibes olor a gas o escuchas algún soplido o siseo sal inmediatamente y deja las ventanas y puertas abiertas. Llama a la compañía de gas, inmediatamente.
Asegúrate que el sistema eléctrico no haya sufrido daños. Si ves chispas o alambres pelados, desconecta la toma de corriente principal. Si tienes que pisar agua para alcanzar la caja de distribución eléctrica, llama a un electricista para que te recomiende qué hacer.
Verifica que las cañerías del alcantarillado o de agua potable no hayan sufrido daños. Si sospechas que tienen fallas llama a la compañía de agua y evita usar agua o el inodoro hasta que vengan.
Toma fotografías de los daños para las reclamaciones de seguro.