Washington. Las renuncias de dos funcionarios de alto rango de la Agencia Central de Inteligencia norteamericana (CIA) revelan la inestabilidad reinante en esa oficina en momentos en que entra en funciones su nuevo director, Porter Goss, coinciden analistas.
El director adjunto de Operaciones de la CIA, Stephen Kappes, y su subalterno inmediato, Michael Sulick, anunciaron su renuncia a la agencia de espionaje, la cual fue fuertemente criticada por fallas de inteligencia en Irak y en los ataques del 11 de septiembre del 2001, indicó AP.
Kappes y Sulick presentaron su renuncia el lunes por la mañana, y se desconoce si lo hicieron voluntariamente o forzados a ello.
Lo anterior demuestra la inestabilidad interna que vive la agencia durante la primera etapa en el cargo de su nuevo director.
La semana pasada, el segundo funcionario en importancia de la agencia, John McLaughlin, también renunció, aduciendo razones personales.
Ex funcionarios, no identificados, dijeron que hay intensas fricciones dentro de la agencia ahora que Goss está a cargo. Y algunos dicen que existen temores de que se pida la renuncia a más agentes del centro antiterrorista de la agencia.
«Es justo decir que actualmente hay una tremenda agitación en los mandos medios del servicio clandestino», afirmó Vince Cannistraro, ex director de la sección anti terrorista de esta agencia de espionaje. «Hasta ocho personas podrían ser forzadas a salir» indicó.