Washington. Pese al llamado del presidente de EEUU, George W. Bush, para que el Congreso apruebe la reforma de los servicios de inteligencia del país, el Partido Republicano se mantiene dividido con un pequeño grupo de legisladores decidido a bloquearla.
La Casa Blanca apuntó que enviaría una carta a los legisladores instándoles a que se unan para desbloquear el proyecto, señaló Efe.
El Congreso inicia hoy una sesión especial en la que los legisladores tendrán la última oportunidad de avalar la polémica reforma antes de que concluya este período.
Los responsables de la comisión que investigó los atentados del 11 de septiembre y la mayoría de los congresistas que defienden la ley sostienen que a pese a no ser perfecta es mejor que nada.
Sin embargo, los republicanos que se oponen al documento argumentan que es preferible hacer las cosas despacio y bien. El presidente de la Unión Conservadora de EEUU, David Keene, considera que el proyecto no contiene disposiciones adecuadas en materia de inmigración.