El líder de una secta religiosa venezolana fue condenado este martes a 16 años y 8 meses de cárcel por ayudar a ahorcarse a una pareja a la que había convencido de que, por el bien de sus almas, debían quitarse la vida y donarle sus pertenencias.
El Ministerio Público dijo en un comunicado que demostró que Luis Bastardo, líder de la secta a cuyos adeptos «manipulaba para obtener beneficios propios e incitar al suicidio», ayudó «en la adquisición de las cuerdas con las cuales los dos jóvenes se ahorcaron e, incluso, permaneció con ellos durante el acto de suicidio».
«Adicionalmente, se encontró en la residencia de Bastardo varios objetos personales propiedad de los occisos» y durante el juicio «se demostró que no había puntos de apoyo en el lugar del suceso», por lo que la pareja pereció «con la ayuda del condenado», agregó.
«Un estudio psiquiátrico presentado durante el juicio demostró, además, que Bastardo tenía un nivel de inteligencia por encima de lo normal, así como un efectivo poder de convencimiento que usaba para manipular», añadió el Ministerio Público.
El juez Juan Chirinos validó las acusaciones de los fiscales y sentenció a Bastardo por inducción al suicidio y homicidio simple de los adolescentes Edwin Sotillo y Naileth Mata, cuyos cuerpos fueron encontrados colgando de la rama de un árbol el 2 de julio de 1993, en los alrededores de la ciudad oriental de Cumaná.
«El proceso duró más de diez años debido al cambio en el sistema de administración de justicia» y por «las tácticas dilatorias ejercidas por los abogados defensores», destacó la nota.