De nuevo los ladrones se llevan obras del pintor noruego Edvard Munch. Esta vez le tocó el turno a una acuarela y dos litografías.
Las tres piezas fueron robadas de un hotel en Jeloeya, en las afueras de la localidad de Moss, al sur de Oslo, según la policía noruega.
Las obras son la acuarela «Vestido Azul», la más valiosa de las tres, y dos litografías: un autorretrato y un retrato del dramaturgo sueco August Strindberg.
Se estima que las piezas -que formaban parte de una colección de siete en posesión del hotel- tienen un valor conjunto de unos US$320.000.
El robo sucede luego de que en agosto pasado otros dos cuadros de Munch, «El Grito» y «La Madonna», fueran sustraídos del museo de Oslo dedicado al pintor expresionista, en un atraco a mano armada.
Este hecho -cuyos autores aún no han sido localizados- originó numerosas críticas contra las autoridades noruegas.
Sin protección
El hotel Refness posee y expone cientos de obras de pintores noruegos, pero ninguna de ellas está protegida por alarmas.
Todavía no se ha establecido vínculo entre este robo y el ocurrido en agosto pasado.
La gerencia del hotel dijo a la prensa que no veía necesidad de protegerlas debido a la presencia de empleados las 24 horas.
Un trabajador de la instalación manifestó haber sorprendido a los ladrones, pero dijo que éstos pudieron escapar con las piezas.
La policía todavía no ha determinado si el robo tiene alguna relación con el ocurrido el verano pasado en el museo Munch de la capital noruega.
