Demandados por corrupción altos funcionarios de Colombia

GERARDO REYES
greyes@herald.com
El presidente de Colombia Alvaro Uribe Vélez, su más cercano asesor Fabio Echeverri Correa y otros funcionarios, fueron demandados el martes en una corte federal del norte de la Florida por supuestos actos de corrupción para favorecer con un contrato petrolero a la compañía estadounidense Drummond Company, que también fue demandada.
Radicada por la firma Llanos Oil Exploration Ltd., con sede en Orlando, Florida, la demanda alega que la oficial empresa colombiana de petróleos Ecopetrol, citando argumentos amañados, anuló un contrato de exploración de un yacimiento petrolero a esa empresa para asignarlo a Drummond.
Echeverri es miembro de la junta directiva de Ecopetrol, y de acuerdo con la querella civil interpuesta en una corte federal de Orlando, el asesor presidencial ha tenido intereses en la filial Drummond, una multinacional productora de carbón con sede en Alabama.
La adjudicación del contrato a Drummond en diciembre del 2003 sólo tardó 18 días, cuando en condiciones normales demora por lo menos un año, explicó a El Nuevo Herald el vicepresidente de la firma demandante, Albert van Bilderbeek.
En cuanto al presidente Uribe, la demanda argumenta que el mandatario, en unión con Echeverri, utilizó al Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), para fabricar un caso de lavado de dinero contra el presidente de la firma perjudicada, el ciudadano de origen holandés Hendrik van Bilderbeek, y así obtener beneficios económicos en el contrato con Drummond.
Hendrik, de 50 años, se encuentra bajo arresto en Bogotá por presuntos cargos de lavado de dinero desde septiembre del año pasado.
»Las riquezas potenciales que se esperaba que este descubrimiento [de un pozo petrolero] podría generar, provocaron que salieran a flote los peores aspectos de la avaricia», afirma la demanda presentada por el abogado Harrison T. Slaugther, Jr.
Ricardo Galán, vocero de la presidencia de la República, explicó que «el presidente Uribe no ha tenido ni tiene conocimiento de los contratos, y mucho menos de la demanda, esos son asuntos que corresponden a Ecopetrol».
También fueron incluidos en la presunta confabulación el presidente de Ecopetrol, Isaac Yanovich, el ex presidente de esa empresa Alberto Calderón, el ex vicepresidente de exploración Víctor Eduardo Pérez y la fiscal Martha Monasalva, a cargo del caso penal de Hendrik en Colombia.
Acogiéndose a una figura jurídica conocida como la ley RICO, (Rackqueteer Influence and Corrupt Organizations Act), la querella sostiene que Ecopetrol robó a la empresa el dinero depositado como garantía del contrato de exploración del proyecto y luego usurpó sus derechos a la exploración del terreno.
En el centro de la disputa está un yacimiento de petróleo en el norteño departamento del Cesar llamado Las Nieves, con un extraordinario potencial de crudo liviano, según los demandantes, que podría convertirse en el hallazgo petrolero más importante en los últimos años en el mundo.
»Para mi es claro que todas estas maniobras están dirigidas a que Estados Unidos se quede con el pozo», dijo en Miami a El Nuevo Herald Albert van Bilderbeek, hermano de Hendrik. «Y el cerebro de esa operación es el todopoderoso Echeverri».
De acuerdo con la demanda, Echeverri «usó amenazas y otros actos ilícitos para instalar sus títeres en importantes oficinas del gobierno de tal forma que pudiera mantener su poder y aumentar las ganancias…».
La secretaria de Echeverri indicó a El Nuevo Herald que sería imposible comunicarse con él dado que se encuentra en viaje a China.
‘Drummond rechaza las acusaciones en los términos más enfáticos’, afirmó George Mencio Jr., abogado de Holland & Knigth en Miami, una firma que ha representado a Drummond. «La demanda no tiene ningún mérito».
Por su parte, Mauricio Echeverry, jefe de la oficina jurídica de Ecopetrol, también rechazó los argumentos de los demandantes.
»Llanos Oil es una empresa de socios problemáticos con un largo historial de incumplimiento», explicó Echeverry.
El contrato con la empresa fue terminado, agregó Echeverry, luego de que Ecopetrol le dio varias oportunidades. Ellos incumplieron con el pago de un respaldo fiduciario y fueron sancionados por no presentar los estudios de impacto ambiental, agregó.
Echeverry explicó que no le parecía insólito que la adjudicación del nuevo contrato a Drummond hubiera tomado menos de un mes, dado que se trata de una empresa conocida, con operaciones en Colombia, y el respaldo de una firma experta en exploración petrolera.
Llanos Oil Exploration es una empresa de inversionistas holandeses, estadounidenses y colombianos, explicó Albert. Entre las firmas que subcontrató para su proyecto en Colombia se encuentra la multinacional Halliburton.
De acuerdo con la demanda, desde 1984 Llanos Oil Exploration invirtió millones de dólares en la elaboración de estudios geológicos o sísmicos en el proyecto del departamento del Cesar.

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