JUAN A. LOZANO
Associated Press
HOUSTON, Texas, EE.UU. – Las autoridades sospechan que la violenta pandilla Mara Salvatrucha, con orígenes en El Salvador, esté relacionada con el asesinato de un niño y por lo menos otras ocho personas en el área de Houston, y esperan que una intensa operación contra sus miembros impedirá que la violencia se propague.
Por lo menos una veintena de miembros de la pandilla, cuyo supuesto líder, un hondureño, fue arrestado en febrero en el sur de Texas, han sido detenidos en la zona de Houston en meses recientes.
«Recién estamos descubriendo la clase de bastión que podrían tener en el área de Houston», dijo Al Tribble, portavoz del FBI en esa ciudad. «Esperamos poder desmantelarlos antes de que se organicen».
Las autoridades dicen que no se ha informado de problemas mayores en otros lugares del estado con relación a la pandilla, que fue creada en Los Angeles en la década del 80 por inmigrantes salvadoreños. La pandilla es también conocida como MS-13 y se tiene conocimiento de que decapitan a sus enemigos, y atacan con granadas y machetes.
«Sabemos que cometen crímenes, pero tenemos otras pandillas de mayor trascendencia», dijo la detective Dianna McLuckie, de la Unidad de Pandillas del Departamento de Policía de Dallas.
Las policías de San Antonio y El Paso dijeron que no habían tenido casos sobre la pandilla.
Los investigadores de la Oficina del Alguacil del condado Harris arrestaron a cinco miembros de Mara Salvatrucha con relación al asesinato a balazos de un bebé de año y medio de edad, Aiden Naquin, que estaba en el automóvil que su padre, Ernest Maquin, conducía cuando fue acribillado por hombre el 12 de abril.
Las autoridades creen que el hombre le había vendido Xanax a la esposa de otro miembro de la pandilla. Un pandillero es acusado de homicidio y otros cuatro fueron acusados de robo con agravante.
Una operación nacional iniciada desde enero resultó en más de 150 arrestos de pandilleros en siete ciudades estadounidenses, incluso uno en el área de Dallas, dijo Luisa Deason, vocera del Buró de Inmigración y de Aduanas de Estados Unidos, de Houston.
Poco después, el líder de la pandilla MS-13, Lester Rivera Paz, de 29 años, fue arrestado cerca de Falfurrias después que ingresara ilegalmente al país. Rivera, a quien también se le conoce con el nombre de Franklin Jairo Rivera-Hernandez, se le acusa de ser el autor intelectual de una matanza de 28 personas en un autobús en Honduras en los días de Navidad.
Este mes, Rivera se declaró culpable de ingreso ilegal al país después de haber sido deportado. Será sentenciado el 8 de julio.
Otro pandillero de la MS-13, José Adonis Quintanilla-Perez, de 24 años, figura entre 13 inmigrantes ilegales arrestados cerca de Falfurrias el 6 de abril. Será juzgado el 17 de mayo por ingreso ilegal al país.
