En Chile colocan botones de pánico en ataúdes

Abel Fuchslocher L
——————————————————————————–
Sin miedo a fantasmas, los peques de Pedro Aguirre Cerda jugaron de lo lindo en el cementerio Camino a Canaán. La idea es que asuman la muerte como un componente más de la vida.
(Foto: Juan Carlos Cáceres M)
Para evitar la macabra experiencia de ser enterrado vivo, el cementerio evangélico Camino a Canaán pondrá a disposición de sus clientes ataúdes con sensor de movimiento, onda que apenas se mueva el «finado», se despliegue un operativo flash para rescatarlo de la pesadilla.
La idea de esta especie de «botón de pánico» se encuentra bien avanzada en la funeraria del camposanto y se estima que será anunciada oficialmente en mayo, para estar operativa a mediados de año.
La bibliografía médica, la literatura -como en el cuento «Entierro Prematuro», de Edgar Allan Poe- y las historias de sepultureros hablan de terroríficos casos en que algunos «muertos» se han despertado con kilos de tierra encima y han intentado salir a la superficie sin éxito. Se culpa a la catalepsia, una parálisis generalizada producto de una alteración nerviosa, que se mantiene por largo tiempo.
En Camino a Canaán quieren ser pioneros en evitarlo y así darle tranquilidad a la familia de que, de suceder, su ser querido será salvado en un dos por tres por funcionarios rapidísimos con la pala.
Esta es otra sorpresa del cementerio evangélico. Con el fin de incorporar la muerte a la vida diaria, sus autoridades han instalado una cafetería, guardería, galerías de arte, salas con acceso gratuito a internet y hasta realizan conciertos una vez al mes.
Sin miedo a la muerte
Y en una nueva iniciativa choriflái, ayer un centenar de niños visitó el recinto con el objetivo de perderle el miedo a la muerte y tomarla sólo como un elemento más de la existencia.
Acompañados de sus padres, monitores del cementerio y profes, recorrieron los prados, jugaron entre las tumbas y dibujaron puras cosas lindas, mientras los tíos le conversaban a papis e hijos.
«Hemos venido a este lugar tan hermoso y pacífico para hablar de la vida y de lo que podemos hacer hoy; abordamos la muerte para hablar de la importancia de hacer las cosas hoy, porque mañana puede ser tarde», comentó Ana Sanhueza, del Colegio Parque Las Américas, de Pedro Aguirre Cerda.
Mientras dibujaba un lindo sol a toda página, la peque Charol Espíndola, de 6 años, señaló que «nos hablaron de cosas bonitas… dijeron que la gente acá no puede vivir, pero nosotros sí».
El jefe de Relaciones Públicas de Camino a Canaán, César Contreras, explicó que fue una experiencia piloto con alumnos de PAC, pero que cualquier colegio puede acercarse para acceder a un tour guiado por el parque. «Les decimos que la muerte es algo natural, dándoles un mensaje más de vida que de muerte», verseó.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *