JULIANA BARBASSA
Associated Press
FRESNO, California, EEUU – Una niña de 11 años que hirió a un niño de una pedrada para defenderse de un grupo de menores en su barrio que le estaban arrojando globos llenos de agua está siendo procesada de un cargo de ataque con arma mortal.
Maribel Cuevas ha dicho que ella no quiso herir al niño de nueve años, quien reconoció ante la policía que él empezó la lucha a fines de abril. El menor herido fue dado de alta después de recibir varias suturas en la cabeza.
Maribel pasó cinco días en un centro de detención juvenil y sólo pudo recibir una visita de media hora de sus padres. Ella pasó luego 30 días bajo arresto domiciliario, portando una pulsera de tobillo de localización GPS, para que las autoridades puedan saber su paradero. La niña deberá comparecer ante una corte a inicios del mes próximo.
«Ellos la tratan como si ella fuera una delincuente violenta» dijo su abogado, Richard Beshwate Hijo.
El vicefiscal del condado de Fresno Bob Ellis dijo que él no podría dar comentarios porque el caso involucra niños.
La policía envió tres automóviles patrulla y un helicóptero en respuesta a una llamada al número de urgencias 911. Las autoridades han negado que su despliegue haya tenido que ver con el barrio donde ocurrió el enfrentamiento, de bajos ingresos y principalmente minoritario, o por las dificultades del idioma. Maribel y su familia hablan español sobre todo y un poco de inglés.
El informe policial dijo que un funcionario le leyó a Maribel dos veces sus derechos, en inglés. La niña ha dicho que los agentes la tomaron de su blusa por atrás.
«Yo estaba muy asustada», dijo ella en español. «Yo no sabía lo que estaban haciendo».
