A las 3:30 de la tarde del pasado jueves, 15 hombres de la Dirección Central de Policía Judicial (Dijín) llegaron hasta una lujosa finca en un sitio conocido como la Loma del Escobero, cerca de Envigado, Antioquia. Iban tras un capo del narcotráfico. Al ingresar en la vivienda encontraron a un hombre de pelo largo, barbado y canoso haciendo ejercicio en una máquina. La figura del hombre desconcertó momentáneamente a los investigadores. En nada se parecía a la fotografía que tenían del capo al que llevaban más de un año buscando.
Con mucha tranquilidad el hombre sacó una cédula con el nombre de José Joaquín Botero. El documento de identidad no era una falsificación, lo cual hizo creer a algunos de los uniformados que se habían equivocado de blanco. Uno de los oficiales que estaba al frente del operativo y quien más conocía la historia personal y el prontuario del capo le pidió al hombre que le dejara ver su billetera. Al revisarla encontró cuatro fotos. «Estas son las fotografías de sus hijos y usted se llama José Aldemar Rendón Ramírez», le dijo el oficial sin dudarlo. Desde hace más de un año el investigador había perseguido a Rendón por varios municipios del Eje Cafetero, Valle del Cauca y Antioquia. Esa labor le permitió identificar y seguir a la familia y a los socios del narcotraficante. Cuando el oficial le contó esto, el hombre palideció y sólo atinó a decir: «Tienen razón, soy yo. Me encontraron».
Rendón es nada más y nada menos que uno de los 10 narcotraficantes más buscados por el gobierno de Estados Unidos. Su nombre y su alias, ‘Mechas’, aparecen los afiches por los que la justicia estadounidense ofrece una recompensa de cinco millones de dólares. Su foto está junto a la de narcos como Diego Montoya, alias ‘Don Diego’ y Wilber Varela, alias ‘Jabón’. Está solicitado por una corte del distrito este de Nueva York para responder por concierto para distribuir varias toneladas de cocaína y lavado de activos. Aunque para la Dijín y la DEA su captura se había convertido en una prioridad, para la mayoría de los colombianos el nombre de Rendón es completamente desconocido.
Rendón nació hace 54 años en Pereira y desde muy joven su fue a vivir a Cartago a probar suerte. En ese municipio se hizo muy popular, ya que era un conocido vendedor callejero de chance. A comienzos de los años 90 empezó a acercarse a un personaje polémico pero muy poderoso en esa ciudad: Hernando Gómez Bustamante. Conocido con el alias de ‘Rasguño’, era uno de los jefes del cartel del norte del Valle del Cauca. En poco tiempo, Rendón se ganó la confianza de ‘Rasguño’ y otros capos de la zona quienes lo encargaron la misión de coordinar los embarques de droga que salían rumbo a México para ser introducida a Estados Unidos. Para comienzos de 2000, Rendón ya había pasado de ser el coordinador de embarques a convertirse en la mano derecha y uno de los socios principales de ‘Rasguño’. Con él compró trilladoras de café en el Eje Cafetero, que convirtió en sus principales empresas de fachada, y junto con su socio adquirió grandes extensiones de tierra en Pereira, Armenia y el norte del Valle.
En julio de 2004, ‘Rasguño’ fue capturado en Cuba y desde entonces Rendón asumió los ‘negocios’ de su antiguo socio y amigo. A pesar de que para ese momento Rendón empezó a aparecer en los afiches de recompensa, él creyó que los esfuerzos de las autoridades estaban enfocados principalmente en capturar a otros narcos más conocidos del cartel como ‘Don Diego’ o ‘Jabón’. Se equivocó. Nunca pensó que las autoridades estuvieran tan cerca de él. Antes de finalizar el año abordará un avión de la DEA rumbo a Estados Unidos. Ese será el final de la historia de un vendedor callejero de chance que se convirtió en capo.
