La Habana. Al menos 21 opositores al régimen de Fidel Castro, entre ellos Martha Beatriz Roque, líder de la disidencia interna en Cuba, fueron detenidos por la policía en La Habana, tras una fallida manifestación a la que habían convocado y cuya realización fue impedida por simpatizantes del Gobierno.
«Confirmamos una veintena de detenciones», informó anoche Elizardo Sánchez, de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHyRN), reseñó AP.
Además de la economista Martha Beatriz Roque, también figuran entre los presos los disidentes René Gómez Manzano y Félix Bonne de la Asamblea para Promover la Sociedad Civil (APSC), el grupo que había organizado en la mañana de ayer una protesta frente a la Embajada de Francia.
Según Sánchez, su reporte se realizó sobre la base de fuentes familiares contactadas a lo largo de toda la jornada de este viernes, aunque indicó que en las próximas horas podrían producirse liberaciones, tal como sucedió en incidentes similares anteriores.
En el caso de Gómez Manzano, su hermano, Jorge Gómez Manzano, confirmó la captura policial. «Se identificaron como de la Seguridad del Estado y le pidieron que los acompañara».
Convocada para las 10:00 de la mañana, sólo una decena de disidentes pudo llegar a la cita en la acera contigua a la representación gala en esta capital.
«Nuestro objetivo era reclamar a los países europeos para que se interesen por los presos políticos», indicó Adolfo Lázaro Bosk, cuando logró arribar ante la sede diplomática.
Los alrededores estaban custodiados por hombres vestidos de civil pero con dispositivos de intercomunicación.
Varios diplomáticos europeos acudieron al lugar como observadores.
Entretanto, la CCDHyRN informó que docenas de personas invitadas a la protesta no pudieron salir de sus casas, pues los activistas progubernamentales las rodearon y agentes de la Seguridad del Estado les advirtieron que no salieran de sus viviendas.
«Se reportaron unos 40 casos de este tipo», dijo Sánchez de la CCDHyRN.
Uno de ellos fue León Padrón Azcuy.
Unas 40 personas, identificadas como vecinos, se agruparon ante la casa de Padrón en el barrio del Vedado, dando vivas a la revolución.
«Algunos simpatizantes del Gobierno explicaron su posición a periodistas internacionales: «Este hombre (Padrón) pertenece a grupos mercenarios pagados por EEUU», argumentó Alberto Lisea, al abogar por el derecho de los ciudadanos a «defender» su patria.
A su lado, otros dijeron que no permitirán a estos «contrarrevolucionarios» estropear «los festejos del 26 de julio», efemérides del asalto al Cuartel Moncada y el comienzo de la lucha de los guerrilleros de Castro.
Los manifestantes también rodearon el edificio donde vive Angel Pablo Polanco, otro miembro de la APSC. «Se apostaron desde el amanecer y hubo forcejeos», dijo Lisea.
La semana pasada, el canciller Felipe Pérez Roque justificó varias manifestaciones progubernamentales como éstas en contra de disidentes.
