Bogotá. Advierten en el Valle del Cauca un sorpresivo renacimiento de los grupos paramilitares. Ejércitos privados de narcotraficantes llenaron el espacio que dejó la desmovilización del Bloque Calima y causan alarma.
El síntoma más reciente de esta preocupante metamorfosis son los panfletos que aparecieron en los últimos días en el norte del Valle, como en 1999, en la antesala de la llegada del bloque Calima de las Autodefensas, desmovilizado en diciembre pasado, decenas de volantes han circulado en Trujillo, Riofro y Tulu, citó AP.
En ellos se anuncia la aparición de un grupo de «paras» que promete vengar el ataque de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia a la base de Tetey (Putumayo), que dejó 21 militares muertos.
Aunque militares de la zona dicen que no hay confirmación sobre el grupo, el gobernador del departamento, Angelino Garzón, no parece tranquilo y pide prender las alarmas para evitar que se repita un capítulo amargo.
