Associated Press
BOGOTA – El senador colombiano Germán Vargas Lleras salió ileso el lunes de un atentado con un automóvil bomba, cuando salía de una emisora de esta capital.
«Estaba grabando el programa que hago los lunes y cuando salía de la emisora y me dirigía a mi residencia nos sorprendió esta bomba. Estoy preocupado por mis escoltas», precisó visiblemente consternado el congresista, en declaraciones al telenoticiero RCN.
«Por fortuna salí bien. Un poco impresionante el acto, pero bien», añadió.
«Su carro resistió el ataque de la bomba, que fue muy fuerte. No existe la misma información del carro que acompañaba a los escoltas. No se sabe qué pasó con ellos», dijo Néstor Morales, director del programa «Hora 20», de Radio Caracol, en el que frecuentemente participa Vargas Lleras.
Las autoridades indicaron que se trataba de un automóvil bomba inicialmente, para luego señalar que se investigaba el verdadero origen de la explosión. Sin embargo, el fotógrafo de The Associated Press captó imágenes de un vehículo totalmente destruido, del que dijeron fuentes del escuadrón antiexplosivos que fue el origen de la detonación.
Junto con otras personalidades de la política nacional, Vargas Lleras trató la noche del lunes temas como la reelección y el trasladado de cárcel de uno de los líderes paramilitares que negocia con el gobierno la desmovilización de combatientes de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
«No les puedo describir los hechos. Estamos pendientes de los escoltas, cuya suerte no conocemos. Me da pena colgarles», dijo en una entrevista previa a la emisora Caracol.
El presidente Alvaro Uribe, quien se hizo presente en el sitio de los hechos acompañado de su ministro del Interior, Sabas Pretelt, ofreció 500 millones de pesos (unos 217.000 dólares) por informes que conduzcan a la captura de los responsables.
«Esto nos duele inmensamente… Ejército, policía y DAS (policía secreta) trabajarán para ver cómo los capturan y así evitar este resurgir del terrorismo en la capital de la república», dijo Uribe, visiblemente afectado por la noticia.
Según la policía hay nueve personas heridas, tres de ellas parte de la escolta de Vargas. Al parecer, las seis restantes son civiles que transitaban por el lugar.
Esta es la segunda vez que Vargas Lleras sufre un atentado contra su vida.
En el 2003 le fue enviada a su oficina del Congreso, cuando era presidente del Senado, una carta bomba que estalló en su cara cuando la abrió. El hecho le produjo la pérdida de dos dedos y heridas en el rostro. El ataque con la carta bomba fue atribuido en ese entonces por las autoridades a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Según Morales, la explosión ocurrió cuando Vargas salía en su automóvil de las instalaciones de Caracol, al norte de Bogotá.
La zona donde se produjo el atentado es un sector residencial. Ventanales y fachadas de edificios y casas de la zona registraron averías.
«Es una noticia deplorable y censurable. Este es un mal síntoma de la intolerancia que vive el país», dijo en entrevista radial el ex ministro de Hacienda, Juan Camilo Restrepo, quien participó en el programa con Vargas Lleras.