MIAMI BEACH, Florida, EE.UU. – Las autoridades federales buscaban el martes pruebas de las causas del estallido y hundimiento de un hidroavión frente a las costas de Miami Beach, con un balance de 20 muertos, entre ellos tres niños.
Los funcionarios del FBI dijeron que no había inicialmente indicación de que se trató de un atentado terrorista.
Maurice D’Giovianni, de 42 años, uno de los surfeadores en la playa, dijo el lunes que escuchó una explosión antes de que cayó un ala del avión. Casi enseguida, el aparato se precipitó al agua, dejando una estela de llamas y de humo.
«Estalló en el aire, y una de las alas cayó», informó D’Giovianni. «La otra parte del hidroavión estaba en llamas, y se precipitó directamente (al mar), como un mosquito».
Mark Rosenker, presidente interino de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte, dijo el martes que los investigadores esperan encontrar la caja negra de la aeronave para determinar si proporciona alguna clave sobre por qué cayó la nave el lunes, momentos después de despegar. El avión, de la empresa Ocean Airways, tenía 58 años de antigüedad.
Se espera que la mayor parte del avión, incluido su fuselaje, sea sacado el martes del lecho del mar. Hasta ahora han sido hallados 19 cadáveres. El vigésimo sigue desaparecido, informó Rosenker.
El funcionario dijo a la prensa que los investigadores examinarán todas las causas posibles y pidió a los testigos que tomaron fotografías o hicieron grabaciones de vídeo de la caída del hidroavión que entreguen su material.
Dos tripulantes y 18 pasajeros iban en la aeronave con destino a Bimini, en las Bahamas. Muchas de las víctimas iban de regreso a la isla, luego de realizar compras navideñas en Estados Unidos.
La empresa Chalk’s Ocean Airways, que fue creada en 1919, tiene una flota de hidroaviones, que han aparecido en programas de televisión tales como Miami Vice.
