Bogotá. Alonso Baquero, alias «el negro Vladimir», un paramilitar acusado por la justicia colombiana de haber asesinado a unas 100 personas en la década de los ochenta, quedará en libertad tras haber purgado 16 años de cárcel, lo que provocó «sorpresa» en la Procuraduría, indicó la prensa local.
La decisión de dejar en libertad a Baquero fue tomada por un juez segundo de Ejecución de Penas de Palmira (suroeste), que aseguró que el acusado cumplió todos los requerimientos exigidos para dejarlo en libertad, citó DPA.
Según el funcionario judicial Vladimir tiene derecho a la libertad condicional tras obtener la rebaja de su pena por colaboración con la justicia, estudio, trabajo, el pago de una caución de un salario mínimo (unos 195 dólares), y por haber cumplido tres quintas partes de su condena.
«Después de valorar la conducta de Baquero durante su permanencia en prisión… se encuentran acreditados todos los requisitos para conceder la redención de la pena», dijo el juez al diario El Tiempo.
A su turno, la Procuraduría General inició una investigación para revisar la decisión que tomó el juez de Palmira por haber ordenado la libertad del paramilitar.
«El juez que concedió la libertad condicional fijó un periodo de prueba de 7 años, un mes y 20 días, que equivale exactamente al tiempo que le faltaba para purgar la pena impuesta», señaló el Ministerio Público en un comunicado.
Baquero fue condenado a 30 años de prisión por su participación en la masacre de La Rochela en 1989, donde fueron ultimados 15 miembros de una comisión judicial; la muerte de 14 personas en la población de Cimitarra en 1987; la masacre en el municipio de Segovia en 1987, donde resultaron 50 personas muertas; y de Puerto Boyacá en 1987, cuando fueron secuestrados y asesinados 19 comerciantes de la zona.