J. NEYMAN y W. DeMARZOThe MIami HeraldDurante seis largos días, cientos de miembros de diferentes agencias policíacas recorrieron las calles de Miami-Dade en busca del supuesto violador que acababa de escaparse de la cárcel.
Hasta el propio jefe de policía de Miami, John Timoney, se sumó a la cacería humana, pedaleando su bicicleta por las calles de la ciudad tras Reynaldo E. Rapalo.
Sin embargo, fue la promesa de una recompensa de $38,000 y una llamada el lunes 26 de diciembre a Crime Stoppers del Condado Miami-Dade lo que ayudó a los policías a atrapar al acusado de violación, seis después de su audaz fuga del Centro Correccional Turner Guilford Knight (TGK).
Si la persona no hubiera llamado a las autoridades, la policía estima que Rapalo, de 34 años, tal vez hubiera hecho de las suyas otra vez. En el momento de su arresto, comunicó a los policías que lo capturaron que ya tenía detectadas dos víctimas posibles.
La persona que llamó a la policía indicó que lo vio frente al supermercado Winn-Dixie, en Bird Road y la avenida 67 del suroeste.
»Tenía puesta una sudadera oscura con una camiseta de un color parecido al rosado debajo», apuntó Jack Sullivan, director ejecutivo de Crime Stoppers de Miami-Dade.
En apenas segundos, Crime Stoppers alertó a la fuerza operativa especial que había estado buscando a Rapalo desde que se fugó utilizando una cuerda de sábanas .
Veinte minutos más tarde, Rapalo era apresado.
»Este es un ejemplo excelente de cómo las dos organizaciones, tanto Crime Stoppers de Miami-Dade como de Broward, funcionan con eficiencia», afirmó Sullivan. «La información llegó a Crime Stoppers, y enseguida se la transmitimos a la policía y lo arrestaron».
El anónimo que llamó recibirá la recompensa, una de las más grandes que se haya ofrecido en los últimos 10 años, sentenció Sullivan.
La llamada fue una de las miles que han ayudado a las autoridades en los condados de Broward y Miami-Dade a resolver crímenes y delitos, así como a recuperar propiedades robadas desde que en 1981 se instauró el programa.
Los programas de Crime Stoppers del sur de la Florida siempre se han catalogado entre los primeros de todo el mundo, sobre todo durante el auge de la guerra antidrogas de los años 90, señaló Cal Millar, portavoz de Crime Stoppers International.
»Era muy común hace 10 ó 15 años encabezar los decomisos de drogas de todo el mundo», agregó Millar.
Y en los 25 años de existencia de las dos organizaciones, apunta Sullivan, no se ha revelado la identidad de ninguna de las personas que ha llamado. El programa permite que éstas permanezcan en total anonimato.
»Ese es uno de los secretos de nuestro éxito», afirma Sullivan, y explica que aunque la recompensa ayuda a llamar la atención sobre un determinado hecho delictivo, mucha gente teme presentarse a reclamarla.