Los hermanos Rodríguez Orejuela ganan ‘round’ a justicia de EE.UU. que los acusaba de soborno
A Miguel y Gilberto los señalaban de haber incurrido en esa conducta sobre otro detenido en el Centro de Detención Federal de Miami.
Sin embargo, por no encontrar evidencias que los relacionen directamente en el supuesto intento de soborno, el juez Federico Moreno, que preside el caso en contra de los jefes del Cartel de Cali, desestimó la vinculación de los narcotraficantes colombianos con el hecho.
A pesar de la insistencia de la Fiscalía del Sur de la Florida que hace dos semanas mandó al despacho de Moreno una detallada transcripción de la cinta y que esta semana en la corte hizo sonar el cassette durante la audiencia de uno de los presos involucrados, el juez fue enfático en sus comentarios.
“No hay evidencia en la grabación de que los Rodríguez estén involucrados”, dijo Moreno antes de dictar sentencia de 16 años de cárcel contra el colombiano Florentino Riveira Farfán.
En la cinta se escucha a Riveira Farfán y a otro detenido llamado Enrique Bover conversar sobre el pago de $50.000 dólares, supuestamente a nombre de los Rodríguez Orejuela, por decir en juicio que él sabía de dos testigos de la Fiscalía –Jorge Morales y Luis Rebellón- adiestrados para mentir sobre las actividades ilegales de los capos colombianos.
Riveira Farfán, acusado de narcotráfico y quien esperaba una sentencia máxima de once años por su colaboración con la justicia norteamericana, recibió cinco años extra por el episodio con el cassette, con el que según el juez Moreno trató de “desacreditar” a algunos de los testigos que usará la fiscalía en contra de los Rodríguez Orejuela cuando se inicie su juicio en septiembre próximo.
Bover, el otro involucrado, es un ex informante de la DEA que también trabajó con el Departamento de Inmigración y que está en la cárcel por haber participado en hechos confusos en los que 10 kilogramos de cocaina desaparecieron en 1998.
El abogado defensor de Miguel Rodríguez, Roy Kahn, quien se había mostrado molesto por las acusaciones iniciales de soborno, le dijo ayer a EL TIEMPO que ya nada le sorprendía en el caso de los colombianos. “Así es este mundo de la cárcel, donde todos tratan de mentir para lograr una rebaja de pena y que mejor que a costa de los Rodríguez Orejuela”.
Reconoció que los Rodríguez Orejuela conocían a Riveira-Farfán de una cárcel colombiana, posiblemente la de Cómbita, pero que ni en el pasado ni en el presente habían tenido ningún tipo de relación con él.
Agregó que su defendido y su hermano – quienes siguen aislados del resto de la población de esa cárcel- tienen orden expresa de no hablar con nadie en las pocas ocasiones en que tienen contacto con otros detenidos. “Saben que lo que pasó (con la grabación) no es un caso aislado y que se puede volver a repetir”, agregó Kahn.
Por su parte, los fiscales Matthew Axelrod y Lynn Kirkpatrick, que actuaron en el caso de Riveira-Farfán insistieron hasta el final de la audiencia en la participación de los narcos colombianos, señalando que era claro que éste había actuado a nombre de ellos y para conseguir rebajas en su sentencia.
Kahn dijo que la insistencia de la Fiscalía en este suceso se debía a su deseo de conservar a los Rodríguez Orejuela en la unidad de seguridad especial en la que los tienen recluidos, no cediendo así a las peticiones de los detenidos de que los dejen estar con el resto de la población del lugar.
Sobre si el episodio del supuesto soborno podría o no ser usado en contra de los capos en su juicio, dijo que no creía que fuera la intención, “pero que todo se podía esperar en este caso”.
Anunció que esta semana presentó una moción ante el juez Moreno solicitando a la Fiscalía del Sur de la Florida limitarse en el juicio a hechos sucedidos después de 1997, tal y como sugiere el tratado de extradición vigente entre Colombia y Estados Unidos, y no al historial delicitivo de sus defendidos. “Estamos esperando una respuesta de la Fiscalía y la determinación del juez”, explicó Khan.
Aclaró que la situación de los colombianos era la misma de los últimos meses. “Están juntos, Miguel y Gilberto, pero totalmente aislados, sin llamadas y sin visitas. Preparándose para el que será un largo juicio”, señaló Khan, quien agregó que “de William Rodríguez no sé nada”.
En las próximas semanas se espera un pronunciamiento del juez Moreno sobre la petición de la defensa. La fecha del juicio contra los Rodríguez Orejuela sigue prevista para septiembre de este año.
Por TATIANA MUNEVAR B.
Para EL TIEMPO
Desde Miami