Detectan en Venezuela a red que traficaba con chinos

JAVIER IGNACIO MAYORCA
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En los alrededores del edificio Chapultepec, ubicado en la urbanización La Florida, todos se sorprendían cuando veían a grupos de chinos que desde la segunda semana de enero se paseaban por la calle sin hablar una palabra de español.
Rara vez se alejaban a más de dos cuadras del inmueble. Lo hacían cuando salían en vehículos particulares que los recogían para llevárselos con destino desconocido.
Al final de la jornada, eran vistos en las afueras del centro comercial La Florida.
Más de un mes estuvieron los 14 chinos alojados en un apartamento del referido inmueble, hasta que una comisión de la División de Investigaciones y Protección en Materia de Niños, Adolescentes, Mayores y Familia de la policía judicial se los llevó, en el curso de una pesquisa sobre explotación de personas.
El jefe de esa dependencia policial, comisario Jesús Benavides Páez, relató que fue necesario solicitar la colaboración del consulado chino, para traducir las declaraciones de las personas y hacer el descarte de víctimas y victimarios.
Cada uno de los inquilinos del inmueble, relató el funcionario, estaba en el proceso de cancelación de deudas que ascendían hasta 40.000 dólares, por el traslado desde Cantón u otras provincias de ese país hasta territorio venezolano.
Indicó que todos entraron a Venezuela por el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía, en vuelos procedentes de Japón, Gran Bretaña y otras naciones.
Durante la revisión de los pasaportes se detectaron irregularidades en algunos visados: las firmas no correspondían a las de los cónsules de cada localidad.
Por esta razón, al delito de explotación de personas se unió el uso de documento falsificado.
El hombre señalado de supervisar las actividades del grupo encontrado en el apartamento de La Florida, Chen Sheng Hung, explicó a las autoridades que les prestaba un servicio a las víctimas, quienes –según su versión– habían llegado al país en viajes de turismo o de negocios.
Los nombres de las personas que permanecían en el apartamento quedaron bajo reserva.
En cuanto a los detenidos, se conoció extraoficialmente que se trata de Wu Du, Yang Neng Shun, Gao Zuocal, Dong Xinde y Don Xuming. Ninguno es menor de edad. La fiscal primera nacional en materia de identificación y extranjería, Mery Gómez, imputó a Hung por explotación de personas. Todos permanecían en la división de Capturas de la policía judicial, mientras esperaban la orden de traslado a un retén judicial.
Según el comisario Benavides, el apartamento había sido alquilado a este grupo el año pasado, cuando introdujeron al país a otra cantidad de chinos.
Igualdad de sexos
La división policial que investiga este caso fue creada en 2004. Desde entonces, ha instruido expedientes sobre explotación laboral o sexual a 76 personas.
De ellas 39 son mujeres.
Se trata de grupos que a menudo operan con conexiones internacionales.
Según Benavides, muchos de los individuos que figuran como víctimas son en realidad emigrantes, que dejan sus países para buscar mejor calidad de vida.
Durante los últimos dos años, los agentes de esta división han detenido a 18 extranjeros y a 9 venezolanos por los referidos delitos.
Mercancía asiática
En enero de 2004 corrió el rumor de que las autoridades policiales del estado Bolívar estaba tras una banda que traficaba con ciudadanos chinos. El centro de operaciones se suponía que era la ciudad de Georgetown (capital de Guyana) y de allá eran trasladados los asiáticos hasta Tucupita y Ciudad Bolívar.
Los extranjeros ilegales, apoyados presuntamente por funcionarios de inmigración utilizaban la capital del estado Bolívar como punto para obtener documentación legal.
Eran trasladados hasta Delta Amacuro y ubicados en Tucupita.
Posteriormente eran llevados a San Félix y alojados en hoteles de bajo costo, donde un gestor tramitaba sus documentos de identidad para enviarlos a la capital. Se habló de que cada asiático cancelaba 7.000 dólares para recibir documentos aparentemente legales.
No fue sino hasta marzo de 2005 que la Guardia Nacional aprehendió en esta entidad a 12 chinos que tenían documentos de identificación falsos.
El jefe del Comando Regional Nº 8, en aquel momento, general Alberto Betancourt, dijo que fue durante una inspección a una camioneta, en un puesto militar, que los guardia nacionales descubrieron el grupo de indocumentados.
Los extranjeros fueron apresados y puestos a la orden de la Fiscalía y las autoridades de la Oficina Nacional de Identificación y Extranjería. En la operación, la GN incautó 18 pasaportes y numerosas fotografías de personas que no integraban el grupo de detenidos.

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