COLPRENSA
Bogotá
El ministro del Interior y Justicia, Sabas Pretelt De la Vega, aceptó que los cultivos ilícitos son más de los que se pensaban, pero aclaró que la falla es de los sistemas de monitoreo y aseguró que la lucha de erradicación es efectiva y debe continuar.
El jefe de dicha cartera se pronunció tras conocerse un informe de la Oficina para Políticas Nacionales del Control de las Drogas de Estados Unidos, conocida como Ondcp, por su sigla en inglés, que revela que a finales de 2005 se detectaron 144 mil hectáreas de cultivos de coca en Colombia, un 26% más que en 2004 cuando la cifra era de 114 mil.
La Casa Blanca también confirmó que el incremento se debe a que fueron monitoreadas zonas que antes no eran revisadas y no a un fracaso de la estrategia de fumigación.
Según fuentes oficiales de Estados Unidos, con el nuevo sistema de vigilancia, se incrementó en un 81% el área que se midió en 2005 con respecto al año anterior.
“Lo que está sucediendo en este momento, es que se ha venido mejorando el sistema de monitoreo. Tanto el Simci de la ONU como el Ondcp de Estados Unidos están entrando a unas áreas donde no había un buen control en la medición por razones de tiempo, nubosidad, etc”, concluyó Pretelt De la Vega.
Según el alto funcionario, con estas nuevas mediciones se comprueba que el problema es más grande de lo que se venía contabilizando.
Pretelt De la Vega mostró como ejemplos de la eficacia de la estrategia de erradicación de cultivos ilícitos el hecho de que se hayan reducido de manera tangible los sembradíos en departamentos como Córdoba, Antioquia, Vaupés, Vichada, Amazonas y Cauca.
Hablan los candidatos
Los candidatos presidenciales también se refirieron a la política de erradicación de cultivos ilícitos y criticaron la fumigación aérea, que según ellos, no está dando los resultados esperados, mientras que sí causa daños al medio ambiente.
Para Carlos Gaviria del Polo Democrático Alternativo, es claro que se está perdiendo la lucha contra el narcotráfico, porque los mecanismos que se vienen utilizando son equivocados.
Álvaro Leyva, por su parte, calificó la política de fumigación como “un fracaso” y dijo que además afecta a los habitantes de esas zonas.
