Madrid. Unos 5.000 inmigrantes africanos llegaron a las costas de las islas Canarias a bordo de embarcaciones precarias en los primeros cuatro meses de 2006, y unos 3.500 fueron trasladados a la península, afirmó el delegado del Gobierno en Canarias, José Segura.
«De los 5.000, 3.400 o 3.500 fueron enviados a la península», indicó el responsable a la radio Cadena Ser, citó AFP.
Para evitar la saturación de los centros de acogida canarios, inmigrantes irregulares son enviados a menudo a España continental donde quedan en libertad si en 40 días no se establece su nacionalidad.
Según el ministerio español del Interior, 4.715 inmigrantes llegaron a bordo de embarcaciones precarias llamadas «cayucos» o «pateras» a las islas Canarias en 2005, casi la misma cifra en los primeros cuatro meses de 2006.
Para enfrentar esta llegada masiva de inmigrantes _unos 500 llegaron desde el viernes pasado, en su mayoría procedentes de Mauritania_ la policía se vio obligada a habilitar el estacionamiento de la comisaría de la playa de las Américas, en la isla de Tenerife, para alojar a unos 200 inmigrantes.
Otros fueron alojados en celdas de la comisaría. Esta llegada masiva de inmigrantes coincide con el aniversario del proceso extraordinario de regularización que el Gobierno socialista español efectuó en 2005, y que permitió que 573.270 inmigrantes irregulares que tenían trabajo obtuvieran permisos de residencia.
El opositor Partido Popular (PP), que ha venido denunciado un «efecto llamada» a raíz de esa regularización, denunció que en España todavía hay 1,3 millones de inmigrantes en situación irregular.
La mayoría de los inmigrantes llegan a España en avión o por carretera desde otros países europeos, pero la llegada por mar en pequeñas embarcaciones cobra más vidas.
