EFE
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA.- El Gobierno de Canarias estudiará hoy la situación creada tras la avalancha de inmigrantes irregulares llegados a las islas, en una reunión de su Gabinete de Análisis convocada con carácter urgente en Las Palmas de Gran Canaria.
La convocatoria del llamado Gabinete de Análisis sobre la Inmigración, que se reunirá presidido por el jefe del Ejecutivo, Adán Martín, se produce después de un fin de semana en el que se ha registrado la llegada clandestina de 1.100 personas, la mayor avalancha de africanos llegados al Archipiélago en pequeñas embarcaciones, cayucos o pateras.
El portavoz del Gobierno de Canarias, Miguel Becerra, pidió ya ayer que el Ejecutivo central y su presidente al frente, José Luis Rodríguez Zapatero, interceda ante la Unión Europea para que adopte medidas ante «la grave situación» del archipiélago.
Horas antes, la vicepresidenta del Gobierno se reunía de urgencia en la Moncloa a los ministros de Interior y Trabajo, así como a altos cargos del Departamento de Exteriores para analizar la situación. Al término del encuentro, María Teresa Fernández de la Vega, anunció que se reforzará a corto plazo la vigilancia áerea y marítima de las fronteras y se suscribirán nuevos acuerdos en África. Además se contratará un satélite para obtener más información.
Otros dos cayucos en Tenerife
Mientras las autoridades tratan de encontrar vías para frenar la llegada masiva de inmigrantes, decenas de subsaharianos siguen llegando a las costas canarias a bordo de cayucos. La pasada noche, otras dos embarcaciones trajeron a Tenerife a 161 personas. En sólo cuatro días se ha localizado en el Archipiélago a 1.100 ‘sin papeles’.
En la primera de las embarcaciones, un total de 82 inmigrantes indocumentados, entre ellos dos menores, arribaron en el puerto de Los Critianos. Taylor precisó que aunque algunos de los subsaharianos presentaban heridas leves, sobre todo úlceras producidas por la acción del sol , todos se encuentran bien.
En la segunda embarcación, 79 ‘sin papeles’ arribaron también en el puerto de los Cristianos. En esta ocasión siete tuvieron que ser atendidos también por las úlceras provocadas por la acción del sol y del combustible.
