BOGOTÁ.- Al menos 15 soldados murieron el lunes en una emboscada de la guerrilla a una patrulla militar en el nordeste de Colombia, informaron fuentes oficiales.
El comandante de las fuerzas armadas, general Carlos Ospina, informó en rueda de prensa que las víctimas fueron “un oficial, un suboficial y 12 soldados”. Solamente tres soldados sobrevivieron al ataque, señaló.
Relató que la patrulla militar “recibió la información de que un sector de la carretera entre Tibú y La Gabarra había un grupo de bandidos realizando un retén ilegal, quemando vehículos y secuestrando gente. La patrulla se dirigió al sitio lo más pronto que pudo a fin de auxiliar a la población que estaba siendo afectada y en ese momento fueron atacados”, agregó.
El hecho ocurrió poco después de que en Bogotá explotara un carro bomba que causó la muerte a un civil y dejó 10 soldados heridos.
Otros dos soldados murieron y seis resultaron heridos en un combate registrado al otro extremo del país, en el departamento de Nariño a unos 540 kilómetros al suroeste del país, también por la detonación de un artefacto explosivo, informó Ospina.
En relación con la emboscada, el alcalde Tibú, Bernardo Betancourt, confirmó que por pobladores que llegaron del lugar del ataque “se conoce que unos 15 militares murieron” cuando fueron atacados mientras realizaban “tareas de control y vigilancia”.
Posible responsabilidad
Los informes preliminares atribuyen la emboscada a la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), a unos 460 kilómetros al nordeste de Bogotá, según Betancourt.
El comandante de operaciones de la Segunda División del Ejército, coronel Alberto Castillo, declaró a periodistas de la AP que “tenemos problemas en ese sector al norte de Tibú pero en este momento tenemos allá al comandante de esa unidad pendiente de todo”.
Se informó que el comandante del Ejército, general Mario Montoya, viajó a la zona para dirigir las operaciones de persecución contra los responsables del ataque armado.
Este es el segundo ataque de gran magnitud contra las fuerzas estatales en esa región, pues en abril murieron 16 agentes de la policía secreta al ser atacados cuando se dirigían a realizar una operación antiguerrillera en la zona.
En esa región hay presencia tanto de las Farc como de las guerrillas del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y del Ejército Popular de Liberación (EPL). También operaban grupos paramilitares en la región.
Otro ataque de consideración se registró en abril en La Macarena, a unos 170 kilómetros al sur de Bogotá, cuando murieron 11 soldados y en esa misma zona habían muerto otros 29 soldados en un ataque en diciembre.