México intensifica lucha antiterrorista

Gobierno de México intensifica guerra contra el narcotráfico
El gobierno mexicano ha intensificado la guerra contra el narcotráfico al extraditar en los últimos días a algunos de los más importantes narcotraficantes y desplegar a 9.000 soldados en un bastión de los cárteles de la droga, con los que ya son unos 20.000 en todo el territorio.
«A los operativos implementados en el estado de Michoacán y en la ciudad de Tijuana, se suman hoy acciones similares en los estados de Guerrero (sur), y en Chihuahua, Durango y Sinaloa», la zona (del noroeste) conocida como ‘triángulo dorado’ del narcotráfico, afirmó el domingo el secretario de Gobernación (Interior), Francisco Ramírez.
El anuncio oficial no se hizo hasta el pasado fin de semana a pesar de que el despliegue del Ejército comenzó hace dos semanas en esa región serrana, donde los narcotraficantes aprovechan la complicada orografía que dificulta la vigilancia para plantar cultivos ilícitos y hacer fluir los alijos hacia Estados Unidos.
Unos 20.000 militares, entre efectivos del Ejército y de la Marina, están implicados en la lucha contra el narcotráfico en cuatro puntos distintos del país, en los que se dedican a la erradicación de plantíos de marihuana y amapola y a controles en las carreteras para interceptar cargamentos de narcóticos.
En este esfuerzo también participan varios miles de agentes de la Policía Federal Preventiva (PFP) y la Agencia Federal de Investigación (AFI).
En los últimos días, ha comenzado también un operativo con policías federales en el estado de Chiapas (sureste), fronterizo con Guatemala, aunque según las autoridades locales, se centrará más en la lucha contra el tráfico ilícito de mercancías, armas y personas, que en el narcotráfico.
Los operativos comenzaron a principios de diciembre en el estado de Michoacán (oeste), el más azotado por la violencia del narcotráfico, a los pocos días de la investidura de Felipe Calderón.
Y se extendieron a principios de año a la ciudad de Tijuana (noroeste), fronteriza con Estados Unidos, y hace dos semanas al estado de Guerrero (sur) -donde se ubica el famoso balneario de Acapulco- que era escenario desde el año pasado de una cruenta guerra entre cárteles.
Entre otros resultados, según las autoridades, se ha conseguido destruir más de 1.500 hectáreas de cultivos ilícitos, incautarse de más de 32 toneladas de marihuana y de un alijo de 2,23 toneladas de cocaína que era transportado por mar hacia Estados Unidos.
También fueron detenidas decenas de personas, entre las que se encuentran secuestradores y narcotraficantes menores, pero hasta ahora no ha caído prácticamente ningún pez gordo del tráfico de droga, salvo un operador del Cártel del Golfo.
«El objetivo de estos operativos no es precisamente el de capturar a elementos relevantes de la estructura de comando y control de las organizaciones criminales», justificó el procurador general, Eduardo Medina.
La violencia en las zonas afectadas se ha reducido, pero todavía sigue presente. Este fin de semana en Tijuana fueron encontrados los cuerpos de cuatro personas ejecutadas.
«Estamos decididos a no tolerar los desafíos para el Estado, que nadie pretenda ponerse por encima de la ley. En mi gobierno no habrá impunidad para nadie», ha reiterado Calderón, quien en los primeros días de su mandato se ha fijado como principal desafío la lucha contra la inseguridad ciudadana.
Según una encuesta publicada este lunes por el diario El Universal, el 74% de los mexicanos considera que la participación del Ejército ayuda a reducir el consumo y el tráfico de drogas.
Hasta el momento, esta ofensiva contra la ola de inseguridad propiciada por el narcotráfico, que dejó más de 9.000 muertos el año pasado, no ha tenido respuesta por parte de los cárteles de la droga.
El gobierno asegura no esperar una reacción contundente como la sufrida en Colombia en los años 90 tras la extradición de los grandes capos de ese país a Estados Unidos.
Sin embargo, las autoridades dicen estar preparadas ante la posibilidad de represalias por la entrega a Washington de siete narcotraficantes, entre los que se encuentran seis líderes de diferentes jerarquías de tres organizaciones criminales y del gran capo del cártel del Golfo, Osiel Cárdenas.
AFP

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