Motín en cárcel brasileña
(Agencia Internacional). Seis personas murieron ayer durante una reyerta entre presos en una cárcel de alta seguridad en el nordeste de Brasil. La policía dijo que las muertes ocurrieron en la prisión Profesor Barreto Campelo, en Itamaracá, en el estado de Pernambuco.
Según las autoridades, decenas de hombres entraron por la fuerza a los calabozos donde las víctimas estaban detenidas.
Dos de los presos fueron apuñaleados y los otros cuatro, quemados.
El ejército envió refuerzos a la cárcel y, aparentemente, ahora todo está bajo control.
Según medios locales, el incidente tiene lugar después de una huelga de hambre, la semana pasada, a través de la que algunos presos protestaban por demoras en sus juicios.
El diario Folha de Pernambuco indicó, en su versión digital, que 33 hombres están siendo investigados en relación con los asesinatos.
Pocos recursos
En Brasil hay unos 330 mil presos y la población penitenciaria casi se triplicó entre 1992 y 2004.
De ese total, unos 135 mil están en régimen de prisiones cerradas, como la Profesor Barreto Campelo y el resto bajo otras modalidades.
El Ministerio de Justicia de Brasil dice que cuenta con muy pocos recursos para hacer frente a los problemas del sistema penitenciario.
El personal que trabaja en las cárceles no siempre tiene la formación adecuada y los procesos en los tribunales pueden demorar años.