Sismo destrozó pueblos enteros en la isla indonesia de Sumatra
PADANG, INDONESIA.- Equipos de rescate trabajaban intensamente en la isla indonesia de Sumatra fuertemente golpeada por un terremoto, encontrando pueblos enteros arrasados por deslaves y a sobrevivientes desesperados por ayuda tres días después del sismo de 7,6 grados.
En la ciudad de Padang los rescatistas todavía estaban peinando la zona en medio de edificios derrumbados ya que se teme que miles de personas estén enterradas bajo los escombros. El sismo que destruyó construcciones y caminos dificultaba el esfuerzo de ayuda, destacó Reuters.
En zonas remotas fuera de Padang, la escala total del desastre recién comienza a dilucidarse, mientras imágenes de televisión mostraban aldeas diezmadas por derrumbes y sobrevivientes bebiendo agua de coco, debido a que las fuentes de agua fueron contaminadas.
«En mi aldea, 75 personas fueron sepultadas. Hay cerca de 300 personas perdidas de toda esta área. Necesitamos tiendas de campaña y excavadoras para sacar los cuerpos pero los caminos están cortados», dijo Ogi Martapela, de 28 años. Algunos aldeanos usaron simples azadones de madera en lo que parecía ser un esfuerzo infructuoso por llegar a los cuerpos bajo la tierra.
«No hemos recibido nada. Necesitamos ropa, alimentos, mantas, leche. Parece que el Gobierno se ha olvidado de nosotros», dijo Siti Armaini, sentada afuera de su destruida casa en Pariaman, a unos 40 kilómetros al norte de Padang y más cercana al epicentro del sismo. Unas 600 personas están desaparecidas a causa de los deslizamientos provocados por el sismo en el noroeste de Padang.
Entre 3.000 y 4.000 personas se daban todavía por desaparecidas el sábado en toda la isla. 70% de las viviendas particulares de Padang -casas que se derrumbaron por completo o han perdido el tejado o la fachada- permanecen totalmente desatendidas, a pesar de que bajo sus escombros hay cadáveres. «Los equipos de emergencia que han venido son insuficientes», aseguró Amora Lubis, antiguo miembro del Parlamento local y ahora empleado de la organización musulmana indonesia Muhammadiyah, junto a los restos de una escuela de formación profesional de Padang.
El balance del maremoto de 8 grados que afectó el martes a las islas Samoa y Tonga, en el Pacífico Sur, llegó a 170 muertos y al menos 10 desaparecidos. Tras el maremoto, los funcionarios locales alteraron su atención de rescatar vidas a proporcionar a los sobrevivientes alimentos, agua y electricidad, sin olvidarse de los desaparecidos.