Hoy en día un Centro de Monitoreo Público tiene a varios operadores sentados en puestos de trabajo, denominados estaciones. Allí, cada operador recibe informaciones de todo tipo, ya sea a través de líneas telefónicas, videos, Internet, radiocomunicaciones o botones de pánico instalados en el área a cubrir; las evalúan y las transmiten al personal competente, que puede ser un organismo oficial de seguridad ciudadana o en el caso de instalaciones privadas se puede tratar del personal de vigilancia. También la información puede ser para los encargados de limpieza, bomberos, tránsito terrestre, policía y servicio médico, o incluso los dueños del local o supervisores de la actividad, si se considera pertinente