Política integral del Municipio Chacao

Gráfico: Para llevar a cabo una política integral en seguridad ciudadana, es necesario contar con diferentes factores que son claves para el éxito de las medidas a tomar: recurso humano, capital social y físico.  Este gráfico fue elaborado por el General Pedro Rangel Rojas (ver currículo en Prefacio).

Asimismo, y promoviendo la convivencia a través de una herramienta interactiva, Chacao puso a disposición de los ciudadanos un método rápido y sencillo para implementar la justicia de paz en sus comunidades, con tan solo ingresar en la página web del municipio.

“Prevenir  situaciones  de  violencia,  disminuir  los  índices  delictivos, solucionar conflictos sin la intervención de los tribunales, educar a la ciudadanía sobre la aplicación de mecanismos de mediación y crear las condiciones para vivir en un entorno de paz y sana convivencia no es algo imposible en los sectores populares del país, sólo basta organización y compromiso”, expresó el ex alcalde del Municipo Chacao, Leopoldo López.

También llevaron a cabo el programa “Comercio y condominio seguro”, el cual consistía en un acercamiento con los entes de seguridad privada de los centros  comerciales, hoteles, empresas privadas, entidades  bancarias, juntas de  condominios,  asociaciones de  vecinos,  empresas  de  seguridad,  centros empresariales y comerciantes del Municipio Chacao, a través de foros preventivos con los funcionarios de nuestra institución.

Aquí se abordaban importantes temas de seguridad, como por ejemplo:

•     Cómo minimizar el hurto y robo de objetos personales en casas, sectores populares, edificios, conjuntos residenciales, locales, apartamentos, sitios públicos, etc.

•     Seguridad en la escuela.

•     Nuevos modus  operandi  de las bandas que operan  en las casas, apartamentos, edificios, zonas residenciales y comerciales.

•     Seguridad en el hogar.

•     ¿Qué hacer en caso de ser víctima o presenciar un delito?

•     Mecanismos para reforzar la seguridad en sectores populares y zonas residenciales.

Otro de los programas que llevaron a cabo en ese municipio en pro de la convivencia ciudadana, fueron los contratos sociales, los cuales beneficiaban a las barriadas populares de esa localidad. Los habitantes de la misma comunidad discutían acerca de los problemas más graves de los que eran víctimas, y generaban acuerdos y decisiones provenientes de ellos mismos. La Alcaldía de Chacao dicta los lineamientos y cumple con las labores de supervisión. Por ejemplo, en una determinada zona, detectaron que el mayor problema era la venta de bebidas alcohólicas, lo cual generaba como consecuencia que los ciudadanos hicieran una de sus necesidades en plena vía pública.

El Contrato Social regulaba los horarios de venta y obligaba a los comerciantes que expendían licor a tener un baño en el interior de su local. De lo contrario, debían construirlo. Esto evitó que los consumidores de alcohol hicieran su necesidad en plena avenida, pero también redujo el número de locales que expendían licor, debido a que los dueños no se interesaron en construirles a sus clientes un baño.

El ex alcalde López asegura que, si hay un debate que para los venezolanos representa la vida es el de la seguridad. “Nosotros hemos hecho un aporte con propuestas concretas de políticas públicas que recogen no solamente la teoría, sino también la práctica de políticas públicas exitosas sobre cómo podemos disminuir los índices delictivos y aumentar los niveles de seguridad, tanto objetivamente como el sentimiento de seguridad que deben tener los venezolanos”. Agrega que, en el tema de prevención, tuvieron que involucrar a todos los actores, rescatar los espacios públicos y llevar a cabo una política comunicacional.

Según el “Plan 180 grados”, una propuesta desarrollada por la Alcaldía de Chacao para reducir la inseguridad en 180 días, el Contrato Social “es un mecanismo de convivencia ciudadana local que fija las formas de regulación de los conflictos”. Tiene como principales bondades:

•     Es acordado y certificado por los ciudadanos de una zona.

•     Se fijan compromisos comunitarios que deben ser respetados por los miembros de la localidad.

•     Es sometido a un proceso de control, seguimiento y evaluación por parte de los mismos vecinos que lo han creado.

•     Reglamenta problemas cotidianos entre vecinos tales como el consumo de licor en áreas comunes, ruidos molestos, formas de utilización de estacionamientos comunes, reglas de aseo de edificios y zonas verdes, acceso a viviendas, entre otros.

•     Al normar  los aspectos más sensibles y cotidianos, se reducen las posibilidades de violencia entre los habitantes y transeúntes.

•     Se constituye en herramienta efectiva para la resolución de conflictos comunitarios, sin la intervención de tribunales.

Según López, en este plan presenta el sistema de justicia como un sistema en cinco eslabones:

•     La prevención.

•     La organización de los cuerpos policiales.

•     El sistema del Ministerio Público.

•     Los Tribunales.

•     El sistema penitenciario.

“De esta manera nosotros lo que buscamos es explicar cómo cada uno de estos eslabones representan una cadena que debe ser abordada con políticas públicas eficientes que puedan, cada una, apuntar hacia la disminución de los índices delictivos, la disminución de la impunidad y el aumento de la seguridad ciudadana”, concluyó el ex alcalde.

En  cuanto  a  la  transformación  del  Municipio  Chacao  en  Caracas, Venezuela, el General Pedro Rangel Rojas, afirma que lo primero que hicieron cuando el alcalde Leopoldo López tomó posesión del cargo (año 2000) fue crear un nuevo modelo de gerencia policial con el fin de fortalecer la gestión en función de la efectividad. También pusieron en práctica la siguiente fórmula, según el ex alcalde López:

Ideas + ciudadanos comprometidos + activismo+

voluntad política = cambio

Es preciso señalar que Chacao está ubicado en el medio de los dos municipios (Sucre y Libertador) más peligrosos y con los niveles de inseguridad más altos en la ciudad de Caracas. Sin embargo, para aquella época, el diagnóstico inicial con el que se encontraron estaba inmerso en:

•     Conflictos intrafamiliares y de convivencia

•     Exclusión social y población vulnerable

•     Violencia y delincuencia juvenil

•     Modelo policial deficiente

•     Alto índice de robo de vehículos

•     Falta de coordinación inter-institucional

•     Ausencia de gestión de riesgo

•     Poca valoración del espacio público.

El General Rangel, actual presidente del Instituto  de Investigaciones de Convivencia y Seguridad Ciudadana (INCOSEC), señala que tuvieron que superar varias dificultades, entre ellas, la resistencia al cambio y la apatía del ciudadano:

1.   Resistencia   al   cambio:      Transformación    de     misión,    visión, procedimientos y reorganización y las implicaciones que traían consigo.

Para vencerla, se implementaron estrategias, dirigidas a fortalecer el capital humano del área de seguridad, tales como: programas de carrera profesional, incentivos, premios y estímulos al eficiente desempeño.

2.   La apatía del ciudadano: esta no fue una labor sencilla, a pesar de ser fundamental para garantizar la articulación de la ciudadanía y las políticas públicas a implementar.

Los principales esfuerzos estuvieron dirigidos a involucrar a los vecinos y poder interiorizar en ellos una cultura de prevención integral. Sin embargo, aun queda pendiente incrementar y consolidar este trabajo.

Rangel asegura que “no pueden manejarse los problemas delincuenciales con  enfoques parciales, sino con estrategias integrales porque las causas que originan la inseguridad son de naturaleza diferente”. Señala que es un problema que corresponde con una enfermedad del cuerpo social.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *