• Evaluar las condiciones actuales: Recursos, tendencias, indicadores y factores competitivos.
• Determinar objetivos y metas: Fines específicos y medibles. Los objetivos deben ser desafiantes y bien enfocados, las metas dan un sentido de propósito.
• Establecer un plan de acción: Se planifican las acciones que se llevarán a cabo para el logro de objetivos.
• Asignar recursos: Presupuestar e invertir los recursos necesarios (activos financieros, físicos, humanos, de tiempo, etc.).
• Ejecución: Delegación de tareas y llevar a cabo las acciones programadas para el logro de objetivos.
• Control: Dirigir y monitorear las actividades en proceso, así como reajustar y solventar posibles errores que se presenten.