Hacia 1975 Estados Unidos comenzó a enfrentar diversos problemas debido a los desórdenes mentales y de inadaptación que sufrieron muchos ex combatientes de la guerra de Vietnam. Cometían delitos y la situación desembocaba en la toma de rehenes. Los individuos con quienes se estaban tratando no eran delincuentes comunes, sino hombres entrenados. Las autoridades cayeron en cuenta de la necesidad de tener unidades especializadas conformadas por personas con el mismo nivel de entrenamiento. Entonces crearon los Special Weapons And Tactics – SWAT- (Armas y tácticas especiales).
Los primeros grupos SWAT recibieron apoyo de las fuerzas especiales militares. Igualmente ocurre en Venezuela, donde los grupos especiales entrenan con la Fuerza Aérea, la Marina y otros cuerpos. Los SWATs reciben otras denominaciones: grupos de soporte de respuesta, grupos tácticos, grupos de intervención, comandos, etc.
Mundialmente, existen otros grupos que operan y atienden ese tipo de acciones, entre los cuales se encuentran:
1.- El grupo de Rescate Asistencia Intervención y Disuasión (R.A.I.D) de la Policía de Francia.
2.- El Special Army Services (S.A.S), adscrito a la Fuerza Aérea de Reino Unido, país donde no existen grupos especiales civiles para operaciones antiterroristas, pues son las fuerzas militares las responsables de atender tales casos.
3.- El GEO de España, cuya misión es combatir contra la Euskadi Ta Askatasuna (ETA).
En Europa es muy tenue la línea que divide el tratamiento operacional entre la delincuencia común y el terrorismo. Por ejemplo, el GEO y la RAID pueden trabajar en ambos casos. Pero dentro de los Estados Unidos, por mandato constitucional, solamente pueden operar grupos que sean de organizaciones policiales, ningún militar puede operar dentro del país. Afuera de sus fronteras, cuentan con el Delta Force (Grupo Delta), que es la unidad élite de operaciones especiales del Ejército; y el SEAL (Foca), el grupo de operaciones especiales de la Marina. Ambos pertenecen a las fuerzas armadas estadounidenses.