Como todo delito complejo, el secuestro moderno e “industrializado” requiere de una infraestructura, planificación y fases perfectamente determinadas. Además de la idea y la planificación, un secuestro requiere de logística y de inversiones iniciales para apoyar la operación. No existe, a nivel internacional, mucha diferencia entre los grupos profesionales que se dedican al delito del secuestro. No se trata de delincuentes que operan en la calle sino de profesionales posiblemente involucrados con narcotraficantes y guerrilleros.