La seguridad publica orientada a la solución

¿Qué es la política de seguridad pública orientada a la solución de problemas criminales?

La política de seguridad pública orientada a la solución de problemas criminales, es un enfoque de la función del mantenimiento del orden público o del orden interno de un país, en el cual diversas actividades de la función policial (cada una de estas actividades agrupadas a su vez en un conjunto de incidentes similares, bien sean estos delitos o eventos de alteración del orden público, en los cuales la policía tenga competencia o deba de actuar) son objeto de un análisis minucioso ejecutado por analistas criminales profesionales y por personal con amplia experiencia en el campo operacional. Esto con la expectativa de que los descubrimientos y aprendizajes que produzcan estos profesionales sobre los problemas criminales específicos que afectan a una comunidad, generen el conocimiento que fundamente el desarrollo de mejores y más efectivas estrategias para enfrentar y/o reducir estos problemas criminales.

La política de seguridad pública orientada a la solución de problemas criminales ubica en el más alto nivel de importancia los siguientes principios:

  • Las nuevas respuestas al problema criminal deben ser de naturaleza preventiva.
  • Las nuevas respuestas al problema criminal no deben depender de la acción o uso del sistema de justicia penal.
  • Se deben involucrar otras agencias gubernamentales distintas a las policías, que puedan apoyar en la planificación y ejecución de estas estrategias.
  • Se deben involucrar a las organizaciones privadas y a las comunidades, cuando su participación proporcione el potencial de reducir significativamente el problema criminal.

La ejecución de la política de seguridad pública orientada a la solución de problemas criminales, debe conllevar el compromiso de implementar una nueva estrategia que rigurosamente evaluada en su efectividad, debe proporcionar subsecuentemente sus resultados en un cuerpo o base de datos de conocimientos, de forma tal que coadyuven no únicamente a los cuerpos de policía en el cumplimiento de sus actividades diarias, sino también, en la profesionalización de la función de la policía en el área de la reducción del problema criminal en sus comunidades.  Herman Goldstein (2001)[i].

Los elementos principales en la política de seguridad pública orientada a la solución de problemas criminales.

  • Un problema es la unidad básica del trabajo policial, mas de lo que pueda ser un delito, un caso, una llamada de emergencia o un incidente.
  • Un problema es algo que le causa daño y concierne a los ciudadanos, no únicamente a la policía. Las cosas que conciernen únicamente a la policía son importantes, pero no son un problema en los términos en que se emplean en esta política.
  • Enfrentar los problemas criminales rutinarios significa más que darle soluciones rápidas, significa trabajar sobre las condiciones que los originan.
  • Los oficiales de policía deben rutinaria y sistemáticamente analizar los problemas criminales antes de tratar de resolverlos, así como rutinaria y sistemáticamente se investigan los delitos ante de efectuar el arresto de los delincuentes. Los oficiales de policía individualmente y los cuerpos de policía como un todo, debieran desarrollar rutinas y sistemas para analizar los problemas criminales de su jurisdicción.
  • El análisis del problema si bien debe ser riguroso, no debe ser complicado en su desarrollo y ejecución. Este principio debe regir tanto para el análisis de problemas criminales como para las propias investigaciones penales.
  • Los problemas criminales deben ser evaluados de forma precisa y exacta, y deben ser descritos todos los aspectos que conforman el problema en si. Los problemas criminales muy frecuentemente no son lo que aparentan ser.
  • Los problemas criminales deben ser comprendidos en los términos de los diversos intereses que están en juego dentro de las comunidades donde ocurren. Los individuos y los grupos de individuos de una misma colectividad, pueden verse afectados de diferentes formas por un problema criminal, y tienen  ideas muy diferentes a como debe buscarse o cual puede ser la solución del mismo.
  • La forma como el problema criminal está siendo atacado en la actualidad debe ser de fácil comprensión, así como también deben ser entendidas las limitaciones de su efectividad con la finalidad de obtener un  resultado comprendido por todos.
  • Inicialmente, cualquier y toda posible respuesta a un problema criminal debiera ser considerada, esto con la finalidad de no coartar cualquier respuesta inmediata que potencialmente pudiera ser efectiva en la solución del problema. Las respuestas que se sugieren tomar, son aquellas emplean la información de lo obtenido en los análisis.
  • La policía debiera proactivamente tratar de resolver los problemas criminales más que únicamente reaccionar a ellos después de las graves consecuencias que estos originan. No debiera limitarse la acción de la policía a únicamente conducir arrestos y detenciones.
  • Un cuerpo de policía debiera incrementar la libertad de acción de sus oficiales en la participación en la toma de decisiones importantes en la resolución de problemas en su comunidad.
  • La efectividad de las nuevas respuestas a los problemas criminales deben ser evaluadas constantemente, de forma tal que sus resultados puedan compartirse con los oficiales de policía del mismo cuerpo y de otros, para que de forma sistemática los cuerpos de policía puedan ir evaluando que respuestas a los problemas criminales están funcionando y cuales no.

El concepto de una política de seguridad pública orientada a la solución de problemas criminales se puede ilustrar con un ejemplo como el siguiente: Supongamos que la policía se encuentra respondiendo varias llamadas de emergencia al día relacionado con el tráfico de drogas y con alteraciones del orden público por ingesta de licor en un determinado sector de la ciudad. El enfoque tradicional de enviar unidades policiales al sitio del suceso y recurrentemente arrestar a los delincuentes o transgresores, van a lograr muy poco en la solución del problema criminal y de la alteración del orden público a largo plazo.

Si sumado a las acciones que son de ineludible competencia de los cuerpos de seguridad, las mismas policías comienzan a incorporar técnicas relacionadas con una política de seguridad pública orientada a la solución de problemas criminales dentro de su enfoque operacional, los cuerpos de seguridad quedarían en condiciones de comprender las causas que subyacen en el problema criminal. Esto debiera consecutivamente incluir la colecta de información incluyendo aquella de la misma colectividad (posiblemente por medio de encuestas a los residentes de los barrios o urbanizaciones afectadas) donde pudiera incluirse entre otros aspectos las siguientes:

  • El análisis de la hora del día que se producen los eventos criminales.
  • Las características o posible identificación de los delincuentes.
  • Los motivos por los cuales los delincuentes prefieren a esas víctimas, a esas horas y en esos lugares.
  • El análisis de por que los delincuentes favorecen sus acciones en esas áreas en particular.

Los resultados del análisis de todas estas informaciones, deben formar la base de conocimiento para producir las respuestas a la conducta del problema criminal. Si bien los cuerpos de policía pueden ser un componente de la respuesta, es muy difícil que por si solos sean la solución al mismo y esto sea motivado a que simplemente y volviendo a  nuestro ejemplo, el análisis seguramente indicará que será necesario involucrar a las asociaciones de vecinos, las empresas privadas que expenden bebidas alcohólicas a particulares,  y otros.

La política de seguridad pública orientada a la solución de problemas criminales puede ser aplicada a diferentes niveles de la comunidad y de la organización policial.  Puede ser aplicada en problemas criminales que afectan a toda una comunidad, en donde se verían involucrados los máximos niveles de la organización policial y de los máximos niveles de la organización gubernamental (el máximo sería el nivel nacional/federal o regional/estadal o municipal/local dependiendo del caso) con el empleo de todos los recursos que ello involucre. Puede aplicarse en un nivel intermedio (una parroquia, urbanización o barrio) donde se involucre una comisaría o jurisdicción policial correspondiente con el empleo de los recursos disponibles en ese nivel. También puede aplicarse en un nivel muy focalizado o específico (una cuadra, centro comercial, parque, un pequeño grupo de problemas individuales, etc.), con el empleo de los recursos de algunos oficiales de policía del sector y otros individuos o elementos necesarios.

 


[i] El profesor Herman Goldstein es uno de los fundadores de la metodología de la política de seguridad pública orientada a la solución de problemas criminales.

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