El Informe global sobre aplicaciones móviles de Norton muestra que la mayor parte de los consumidores europeos (97 por ciento), y en particular los españoles (99 por ciento), están preocupados por la seguridad de las aplicaciones móviles.
No obstante, la sensibilización con el tema contrasta con otros datos constatados en el informe. El 67 por ciento de los consumidores europeos de aplicaciones expone su información a riesgos a veces por desconocimiento, otras de forma voluntaria, comprometiendo su propia privacidad. De hecho, el informe revela que muchos de los que más se preocupan de la privacidad móvil son los que menos precauciones toman para protegerse, todo sea por descargar aplicaciones gratuitas, que son las que más riesgos entrañan.
Datos sobre los consumidores españoles
El informe indica que para divertirse los españoles utilizan aplicaciones para jugar (56 por ciento),escuchar música (51 por ciento) y ver vídeos (49 por ciento).
Por un lado, los usuarios desconocen cómo usan su información privada las aplicaciones móviles. Por ejemplo, uno de cada cinco reconoce no saber con seguridad qué permisos está aceptando cuando descarga una aplicación, son muchos ignoran los niveles de acceso común de las aplicaciones móviles y más de la mitad no son conscientes de que las aplicaciones pueden compartir datos sobre la ubicación del usuario.
Quizás por el desconocimiento, 1 de cada 3 usuarios están dispuestos a compartir su ubicación a cambio de descargar una aplicación gratuitamente, y más del 10 por ciento dan acceso a información privada, como el nombre o número de teléfono de sus amigos, al descargar una aplicación gratuita.
Los investigadores de Norton también han concluido que existe un porcentaje alarmante de aplicaciones que almacenan y comparten información personal como el número de móvil, el nombre de usuario, la contraseña, los detalles del calendario, el registro de llamadas, las imágenes e incluso los mensajes de texto. Esta información, accesible a través de las aplicaciones, puede ser compartida con los desarrolladores y no siempre hay una razón que lo justifique.
Fuente e imagen: pcworld.es