Presidente de Argentina autoriza derribar narcoaviones

Como parte de un amplio paquete de seguridad dirigido a la lucha contra la creciente presencia del crimen organizado y el narcotráfico en el país, Mauricio Macri, el presidente de Argentina recientemente elegido, ha autorizado el derribo de aviones sospechosos de llevar drogas.
El 19 de enero, Macri, quien ganó las reñidas elecciones presidenciales de Argentina en noviembre pasado, autorizó a las fuerzas armadas de Argentina para derribar las aeronaves “hostiles” —una probable referencia a los narcoaviones—.
La disposición de derribar los narcoaviones es una de las muchas medidas de seguridad incluidas en un decreto del gobierno, el cual declaró un estado de emergencia de seguridad pública en todo el país por un año. El decreto también ordena la instalación de un sistema de radares a lo largo de la frontera norte de Argentina y busca renovar el programa de seguridad conocido como “Operativo Escudo Norte”, puesto en marcha inicialmente por la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Sin embargo, fue la autorización de hacer derribos lo que generó inmediatas críticas de los opositores políticos de Macri. El anterior ministro de Defensa de Kirchner, Agustín Rossi, se refirió a esta disposición como una “pena de muerte sin juicio previo”, mientras que la excandidata presidencial Margarita Stolbizer dijo en Twitter que se trata de un “enorme error institucional que puede tener consecuencias irreversibles”.
Análisis de InSight Crime
A pesar de la reacción de los rivales políticos de Macri, la autorización de derribar aviones es bien vista por la población en general, que está cada vez más preocupada por el creciente papel de Argentina en el tráfico de drogas regional.
El presidente ya había criticado la supuesta inacción de Kirchner contra la creciente amenaza del crimen organizado, y durante su campaña prometió ser más duro contra el crimen. Poco después de ser elegido, Macri se comprometió a enviar “un mensaje claro”de que las autoridades iban a “tomar el control del territorio” en las manos de los narcotraficantes.
Argentina se suma a un creciente número de países de América Latina que han autorizado el derribo de aviones cargados con drogas ilegales, un instrumento de interceptación que algunos funcionarios antidrogas de la región consideran indispensable.
El derribo de aviones sospechosos de llevar drogas está cargado de dilemas morales y legales. Pero parece que muchos políticos están ignorando estos asuntos, dada la protesta pública por la violencia y la corrupción, ninguna de las cuales se soluciona derribando aviones sospechosos de cargar drogas.
Perú, por ejemplo, eliminó los derribos de aviones en 2001, después de que las fuerzas de seguridad derribaron por equivocación un avión civil que transportaba, entre otras personas, a una misionera estadounidense y su pequeña hija. Pero el año pasado, la nación andina reinstauró la ley de derribos, debido a las preocupaciones de los funcionarios del gobierno y de la opinión pública en general, de que Perú estaba a punto de convertirse en “un narco-Estado”.
Fuente:   es.insightcrime.org