Cultura de seguridad, descifrando lo intangible

Tener cultura de seguridad es formar parte activa de una especie de tejido invisible pero poderoso que nos previene y protege de peligros. Es ese intangible que recubre a individuos, organizaciones y sociedades para hacerlas más previsivas y resilientes.

Desde hace un tiempo me ha interesado indagar sobre “eso” que convierte a individuos y organizaciones en verdaderos sistemas generadores de tranquilidad y certezas, tanto para sí mismos, como para quienes les rodean, y que de manera sobre simplificada llamamos cultura de seguridad.

En mis empíricas investigaciones sobre cultura de seguridad he descubierto algunos atributos que distinguen a las organizaciones seguras, elevándolas sobre sus pares, otorgándoles, además, ventajas competitivas, no solo para sobrevivir, sino para tener éxito en entornos adversos.

Voy a citar tres de estos atributos que considero muy relevantes y pueden ayudar a calibrar si nos movemos, a pesar de lo intangible, en la dirección correcta.

Anticipar consecuencias de las decisiones: la seguridad no intenta adivinar el futuro, solo pretende estar preparada para cuando llegue. Pronosticar escenarios a partir de la toma de decisiones permite mover piezas de manera calculada y por adelantado, generando conciencia previsiva en las organizaciones, y su vez, realimentando la cultura la prevención. La conciencia anticipatoria es determinante en los procesos de planificación estratégica porque facilita el modelaje de la organización frente a su realidad, explotando sus fortalezas o exponiendo sus debilidades. En tiempos recientes, la Inteligencia Corporativa complementa a la anticipación agregando mayores valores probabilísticos de veracidad a los escenarios pronosticados.

Tener un programa de gestión de riesgos: la manera más eficiente de abordar la seguridad en una organización es enmarcándola en modelo de gestión de riesgos, en los que las probabilidades de materialización y los impactos al negocio puedan ser determinados, con el propósito de construir medidas de mitigación y control. Entendiendo que todo lo que no se pierde se ahorra, la seguridad entonces, se convierte en un poderoso instrumento de ahorro, contribuyendo en la formación de cultura a través del fortalecimiento de valores, como el sentido de pertenencia y el mantenimiento preventivo. Un programa de gestión de riesgos facilita, además, la medición de la efectividad de los proyectos de seguridad estableciendo un parámetro de retorno de la inversión en función de los ahorros generados por la seguridad.

Cumplir las normas por convicción propia: en una organización segura, todos cumplen, respetan y hacen cumplir las normas. En ellas, se establece un sistema de realimentación positiva en el que todos cuidan de todos, produciéndose esa sensación intangible de protección. Cuando se cumplen las normas por convicción se incrementan las relaciones de confianza, se reducen las incertidumbres y aumenta la calidad en todos sus procesos. En este sentido, el modelaje desde los liderazgos hasta las bases es la clave que lo determina todo. Las normas son equivalentes a la seguridad y viceversa, de allí, que es de máximo interés para los que trabajamos en este campo, ser unos guardianes del cumplimiento y unos vigilantes de nuestras conductas. Un aspecto de máxima importancia en relación al cumplimento radica en premiar las conductas seguras y sancionar las que no lo son. La próxima vez que usted baje por una escalera y vea a una persona sostenerse del pasamanos, reconozca positivamente su comportamiento y verá que esa conducta se va a repetir. De la misa forma, cuando observe a alguien de su organización chateando en el teléfono mientras camina, hágale saber que la distracción puede provocar una caída. Aunque no le garantizo resultados inmediatos, cuando premiar y sancionar se convierte en un hábito estamos entonces construyendo cultura de seguridad.

Cultura es el conjunto de prácticas, hábitos y costumbres que de forma implícita y casi sin pensarlo disparan nuestros pensamientos y comportamientos. Construir cultura de seguridad es insertar progresiva pero irreversiblemente en nuestro ADN, actitudes y aptitudes que van a alejarnos de las fuentes de peligro mientras convencemos a otros de hacer lo mismo.

@seguritips