La guía oficial de buenas prácticas en privacidad para el uso de drones

La Administración Nacional de Telecomunicaciones e información ha publicado una lista de buenas prácticas de privacidad voluntaria para usuarios de drones comerciales y no comerciales. Se trata de un tema que levanta gran preocupación en la industria por los problemas de privacidad individual que acarrea en la nueva era de recolección de datos personales con fines comerciales.
La guía de privacidad, consensuada por diferentes organizaciones de drones y de compañías como Amazon o Alphabet (perteneciente a Google), recomienda que los operarios de drones que se dedican a recoger información personal de individuos expliquen qué tipo de datos recabarán. También exige que se explique cuál es el fin de los datos y si será compartida con otros, incluyendo los organismos de seguridad nacionales.
La guía también anima a los operarios a evitar compartir información personal de individuos con fines comerciales sin el consentimiento de la persona, teniendo en cuenta que no se debe usar datos personales sin consentimiento por razones de elegibilidad laboral, ascenso, crédito, sanidad o cualquier otra razón que esté especificada dentro de un sector con marco regulatorio.
La recolección de datos no debería ser prolongada a lo largo de un tiempo razonable, sin el consentimiento individual o en situaciones excepcionales, tales como en incidentes de seguridad o disputas legales.
Las recomendaciones también sugieren que los operadores deben reducir sus actividades con drones en propiedades privadas sin el consentimiento del dueño o sin el permiso legar apropiado. “En ausencia de una importante necesidad de hacerlo de otra forma, o consentimiento de los sujetos, los operarios de drones deberían usarlos con el fin específico de recoger datos intencionadamente donde los pilotos de drones saben que los sujetos tienen una razonable expectativa de tener privacidad”, puntualiza la guía al respecto.
El presidente de EE.UU. Barack Obama ordenó en un memorando en febrero del año pasado a la agencia (NTIA) que desarrollase un proceso de desarrollo y comunicación de buenas prácticas de privacidad, contabilidad y transparencia en relación a los drones.
Al ser recomendaciones voluntarias no han tenido un impacto inmediato en la actividad de los drones; la NTIA ha especificado que no tiene como fin restringir las libertades aseguradas bajo la constitución estadounidense, o reemplazar ninguna autoridad local o federal, aunque ya se conoce que la Administración Federal de Aviación (FAA) lleva tiempo presionando para unificar las regulaciones en cuanto a drones se refiere.
El Departamento de Comercio, estructura en la que se integra la NTIA, “quiere promocionar el uso y desarrollo de la industria de los drones siempre que se pueda ganar en paralelo la confianza de los consumidores”, ha comentado Penny Pritzker, secretaria de Comercio.
La industria y muchos grupos de drones han recibido de buen grado las nuevas recomendaciones, y en algunos casos particulares, han pedido que se permita acoger unificadamente este reglamento en vez de tener reglas particulares según los diferentes estados (debido a la complejidad y dificultad que provoca).
 
Fuente: computerworld.es