Internet lento, llamadas que se cuelgan, mensajes de textos que nunca llegan, caída de la señal de la televisión por subscripción o simplemente la falta de equipos como decodificadores o controles remotos, son apenas algunas de las fallas que presenta el sistema de telecomunicaciones del país y que se prevé se agudice en los próximos meses.
Iván Méndez, director de OpinionyNoticias.com, miembro de la Internet Society, y Fran Monroy, periodista especializado en informática y telecomunicaciones, afirman que se está en presencia de un apagón tecnológico, motivado por problemas de infraestructura que enfrenta la estatal Cantv y el sector de telecomunicaciones.
Según el informe Akamai sobre el estado de Internet, Venezuela es el país más lento para navegar en la red (1,9 de velocidad), mientras que Chile y México destacan por tener 7.3 y 7.1, respectivamente. En ese mismo documento se constata que el país tiene apenas 8,2% de usuarios navegando con velocidad de 4 megas. En cambio, Chile tiene 84%; México, 78; Perú, 64; y Costa Rica, 32.
«Dentro de un año vamos a estar en unos niveles más bajo debido a la caída de la infraestructura del Internet y del aumento de tarifas», manifiesta Méndez, quien explica que sin planes de transición se obliga a los usuarios a abandonar el ecosistema, lo que a su vez aumentará la brecha digital que tanto se combatió durante estos últimos dieciséis años.
Méndez, quien fue nombrado líder para Latam en 2015, pronostica un desplome de la infraestructura del Internet, y advierte que es urgente que las operadoras suban sus precios porque en este sector de negocio la clave es mantenerse actualizado. «Si no se está al día con los cambios en tecnología, esto ocasionará una degradación de la señal, obsolescencia o paro de equipos, además de la imposibilidad de renovar y pagar las licencias de software que permiten que el sistema opere.
Esta desactualización está ocasionando a que el venezolano se pierda de servicios que ya están disponibles en otros países como televisión por streaming y a la carta, desarrollo de aplicaciones, pérdida de trabajo en el ecosistema digital y mucho más, afirma Fran Monroy, quien expresa que «somos ciudadanos digitales de tercera porque tenemos una serie de problemas crónicos de conexión».
El servicio de banda ancha más extendido en el país es Cantv, pero de los veintitrés estados, en ocho no está disponible, asegura Monroy, quien no duda en decir que se está en presencia de un «apagón tecnológico». Ejemplo de ello fue la reciente caída del servicio del Internet de Aba que afectó a varios estados del país. «Esto no es casualidad, se trata de un problema de infraestructura grave».
A esto Méndez añade que la infraestructura es afectada por la falta de equipos tan sencillos como suiches, antenas, controles remotos y routers. «Si no se invierte, no hay renovación de equipos y, en consecuencia, el servicio se vuelve obsoleto». A modo de ejemplo menciona que la velocidad del Internet suele estar por debajo de lo contratado.
Las empresas comienzan a fallar porque no tienen cómo reponer equipos y ello las imposibilita para vender nuevos planes o conexiones. «Actualmente se están canibalizando, pues se están desarmando equipos para reparar y darles soporte a los clientes.»
Movilnet es el que enfrenta mayor colapso, advierte Méndez, quien afirma que el pronóstico es oscuro porque se tiene a la mitad del país conectado a un servicio que en este momento no brinda la conectividad que se necesita. Eso afecta todos los servicios digitales que creó el Gobierno, como pagos de impuestos y servicios, identificación en línea, solicitud de citas, entre otros.
La asistencia que brindan las instituciones se verán afectadas porque no podrán navegar a la velocidad que requieren y los usuarios tampoco tendrán acceso a Internet.
Semanas atrás, Jacqueline Faría, actual presidenta de Movilnet, dijo que la velocidad del Internet en Venezuela es lenta debido a la «democratización» del servicio. «En otros países es más rápido porque lo usan pocas personas y es carísimo. Aquí más del 60% de la población tiene Internet», expresó.
A esta afirmación Méndez responde que se trata de una falacia, porque «la verdadera razón es que no hay inversión en la infraestructura». Y a modo de ejemplo cita el caso de Digitel, que años atrás anunció la llegada de la tecnología 4G en varias ciudades. Lo que ocurrió es que ese proyecto no creció porque no le dieron los dólares necesarios para la compra de nuevos equipos.
Venezuela está quedando rezagada porque se está perdiendo la capacidad de conectarse, pues en otros países ya está entrando en funcionamiento la tecnología 5G.
La solución que plantean ambos expertos es cambiar el modelo económico, eliminar las distorsiones de precios, y adecuarlos a los estándares internacionales. Pero para ello, primero tienen que adecuar el bolsillo del venezolano, concluyen.
Fuente: eluniversal.com