Un incendio puede duplicar su tamaño en 30 segundos y quemar un edificio de dos pisos en 5 minutos.
Lo primero que hay que hacer en caso de incendio en un edificio público es salir rápido, pero en calma y mantenerse lo más bajo posible.
Tocar o sentir las manijas de las puertas antes de abrirlas, pues si están muy calientes puede haber fuego del otro lado de la puerta.
Utilizar las salidas de emergencia o las escaleras, nunca usar el elevador ni irse al techo.
Cerrar las puertas pero no con llave pues el incendio se puede propagar por cualquier ranura.
Al encontrarse ya en un lugar seguro llamar al 911 el número de emergencia en los Estados Unidos informándoles de las condiciones actuales del incendio y la ubicación exacta
Si por alguna razón usted se queda atrapado dentro y no puede salir busque una toalla, funda o cualquier tipo de tela y utilícela como bandera o estandarte ondeándola por una ventana para que los bomberos lo puedan ver al llegar al lugar del siniestro.
Si tiene que caminar en un pasillo o similar y hay humo manténgase lo más cerca al piso o arrástrese si es necesario pues el humo tiende a subir y no permite ningún tipo de visibilidad, por lo mismo utilice las paredes como guía. En estas condiciones es fácil desorientarse.En incendios las muertes por inhalación de humo son muy comunes.
En un edificio público en cuanto le sea posible haga sonar la alarma del mismo. Cada edificio o propiedad pública tiene sus propios protocolos para casos de incendio así que lo mejor es conocerlos e informarse al respecto con los dueños,los administradores o encargados o con las autoridades pertinentes.Cada estado de los Estados Unidos cuenta con su protocolo así que también es importante familiarizarse con él.
Los departamentos de bomberos estadounidenses respondieron a un estimado de1,240,000 incendios. Estos incendios provocaron 3,240 muertes,15,925 lesiones y un estimado de 11.5 mil millones en pérdidas materiales. Hubo una muerte por incendio cada 2 horas y 42 minutos y una lesión cada 33 minutos en el 2013.
Los incendios representan el 4 por ciento de las 31,644,500 llamadas a emergencias. 7 por ciento de las llamadas fueron falsas alarmas.