Quito. El ex presidente ecuatoriano Lucio Gutiérrez, detenido bajo la acusación de atentar contra la seguridad del Estado, fue trasladado del viejo penal García Moreno a otra prisión de Quito _considerada de lujo_ para precautelar su integridad, informó un portavoz carcelario.
En la «cárcel cuatro», creada para que ex policías cumplan condenas, permaneció temporalmente el ex presidente Fabián Alarcón, quien fuera acusado de presuntos hechos de corrupción, destacó AFP.
«El objetivo de ese traslado es estrictamente elevar su seguridad y condiciones de permanencia, que en nuestras cárceles son desastrosas siempre», manifestó.
Por su parte, Gutiérrez denunció un complot para asesinarlo durante un motín que se planeaba en la penitenciaría.
«Al propio director le escuchamos en tres ocasiones que se estaba preparando un motín dentro de la prisión y que entre otras personas le habían puesto precio a mi cabeza», dijo el ex presidente.
Gutiérrez no identificó a los supuestos autores del complot, pero responsabilizó por su seguridad al mandatario Alfredo Palacio, a quien culpa de haberle dado un golpe de Estado.
Mientras, el diario ecuatoriano El Universo señaló que por la muerte de Gutiérrez se ofrecían 100.000 dólares, según una carta que sus abogados, Luis Almeida y Jorge Acosta, entregaron el pasado martes al ministro de Gobierno, Alfredo Castillo.
Entretanto, el presidente del Congreso unicameral de Ecuador, Wilfrido Lucero, calificó de «mentiroso y farsante» a Palacio, al señalar que está obsesionado con la llamada a una consulta popular que dé paso a la Asamblea Constituyente.
Lucero dijo que esa instancia no estuvo contemplada cuando Palacio asumió el poder y anunció que la posición del régimen contra el Parlamento le obliga a realizar en los próximos días «algunas revelaciones».
«Acusar al Congreso de boicotear la consulta popular es ser un mentiroso y farsante. El presidente Palacio ha faltado a la verdad», concluyó.