AGENCIAS | ELMUNDO.ES
MADRID.- Los partidos políticos han valorado con cautela y expectación el anuncio de «alto el fuego permanente» realizado por ETA. El presidente del Gobierno ha llamado a la «unidad» de las fuerzas democráticas y Mariano Rajoy ha brindado su apoyo a Zapatero «con dos condiciones». Por su parte, Batasuna ha exigido al Ejecutivo que abra «una nueva etapa» y que desactive «todas las medidas represivas».
En el comunicado de ETA, remitido a la televisión pública vasca (EITB) y leído en castellano y euskera por una mujer encapuchada que aparece ante la cámara sentada frente a una mesa y acompañada de otras dos personas, todas ellas desarmadas, la organización terrorista hizo un llamamiento a «las autoridades de España y Francia» para que respondan «de manera positiva dejando a un lado la represión».
La banda terrorista señaló además que el «objetivo» de esta decisión es «impulsar un proceso democrático en Euskal Herria para construir un nuevo marco en el que sean reconocidos los derechos» del pueblo vasco y asegurar «de cara al futuro la posibilidad de desarrollo de todas las opciones políticas», proceso al término del cual «los ciudadanos vascos deben tener la palabra y la decisión sobre su futuro».
Asimismo, la banda terrorista expresó su «deseo y voluntad» de que el proceso abierto «llegue hasta al final» y hace un llamamiento de nuevo a España y Francia para que reconozcan sus resultados «sin ningún tipo de limitaciones». «La superación del conflicto, aquí y ahora, es posible», proclama ETA, cuyo alto el fuego entra en vigor a partir de las 0.00 horas de mañana, día 24.
De la ‘prudencia’ a la ‘esperanza’
La reacción al anuncio de la banda terrorista de Rodríguez Zapatero no se produjo hasta la tarde, cuando se celebró la sesión de control al Gobierno en el Congreso. Ante los diputados, el presidente expresó «prudencia» y pidió «calma» y «unidad» a los partidos democráticos. «Nos unía el espanto ante el horror. Confío en que ahora nos una la esperanza», manifestó antes de comprometerse a trabajar por esa «unidad».
Una vez terminada su intervención en la sesión de control, Zapatero realizó una declaración ante los medios en la que advirtió a la sociedad española que el «camino será duro, difícil y largo». «En este camino estará siempre presente en mi ánimo la memoria de las víctimas», añadió el presidente del Gobierno, quien reiteró la necesidad de contar en este proceso con el apoyo de todas las fuerzas democráticas y en especial, el del PP.
‘En este camino estará presente en mi ánimo la memoria de las víctimas’
José Luis Rodríguez Zapatero.
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Horas antes de que hablara Zapatero se produjo la primera reacción del Gobierno al anuncio de ETA, por boca de la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega. En una breve intervención en el Senado afirmó que «el comunicado es una buena noticia», si bien recordó que «el Gobierno tiene toda la obligación de ser más prudente que nunca», añadió.
«Esperamos que todos nos acompañen en esta prudencia. Toda cautela es poca», insistió la vicepresidenta. De la Vega dijo que el Gobierno espera que se trate «del principio del fin de ETA». «El Gobierno va a trabajar con todas las fuerzas políticas, de las que esperamos su apoyo», añadió.
‘Esperamos que todos nos acompañen en esta prudencia’
Mª Teresa Fernández de la Vega.
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Algunos ministros destacaron también la importancia de ser «prudentes» ante el anuncio de ETA. En concreto, el de Interior, José Antonio Alonso, lo calificó de «buena noticia». Y el de Defensa, José Bono, destacó que el uso de la expresión «alto el fuego», frente a «tregua» por parte de ETA le suena a la utilizada por el IRA, lo que «invita a pensar esperanzadamente en que los criminales están cambiando en la dirección adecuada».
Más escéptica fue la valoración del comunicado de ETA hecha por el PP. El líder de esta formación, Mariano Rajoy, leyó un comunicado en el que destacaba que el anuncio hecho por la banda «es una pausa, no es una renuncia a sus actividades criminales». Asimismo, insistió en que la organización terrorista insiste en la «autodeterminación» del País Vasco e «impone sus condiciones».
‘No se puede pagar un precio político a los terroristas’
Mariano Rajoy.
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No obstante, el líder del principal partido de la oposición brindó durante la sesión de control al Gobierno su apoyo y el de su grupo parlamentario al Ejecutivo. Pero, eso sí, bajo dos condiciones: «No se puede pagar un precio político a los terroristas», por un lado, y por otro, «el Estado de Derecho, fuerzas de seguridad y jueces, deben seguir funcionando y aplicando la ley».
Así las cosas, una de las principales incógnitas que surgen ahora es saber si el nuevo escenario producido tras el anuncio de ETA servirá para acercar las posiciones del Gobierno y el PP, profundamente distanciados en los últimos tiempos en lo relativo a la lucha contra el terrorismo. Zapatero y Rajoy acordaron reunirse el próximo martes, 28 de marzo, en el Palacio de la Moncloa para analizar la situación.
‘Necesitamos la participación activa de la sociedad vasca’
Juan José Ibarretxe.
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Desde el País Vasco
El ‘lehendakari’, Juan José Ibarretxe, consideró que «es un día histórico», y anunció que va a contactar con todos los partidos, sin exclusiones, para formar una mesa que negocie un acuerdo para la normalización, que sería sometido después a consulta popular. «Tenemos el derecho y el deber de hacer este camino juntos; necesitamos la participación activa de la sociedad vasca», subrayó el ‘lehendakari’.
Esperada era también la reacción de Batasuna. Desde San Sebastián, Pernando Barrena se encargó de exponer la valoración de la formación ilegalizada al anuncio de ETA. El dirigente abertzale exigió al Gobierno que «abra una nueva etapa» y que «desactive todas las medidas represivas y de condicionamiento político». Asimismo, solicitó un proceso de diálogo «sin exclusión territorial ni ideológica» y que «respete la palabra de la ciudadanía vasca».
‘El Gobierno tiene que desactivar todas las medidas represivas’
Pernando Barrena.
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También desde el País Vasco hablaron el secretario general del PSE, Patxi López, y la presidenta del PP en esta comunidad autónoma, María San Gil, aunque con valoraciones muy distintas. Mientras el primero hizo un llamamiento a todos los partidos para que, «juntos y sin fisuras», se alcance la paz, la segunda dijo que la decisión de la banda terrorista demuestra que «necesita que Zapatero siga en la Moncloa».
La expectación y la cautela marcaron también las valoraciones de otros líderes políticos. El líder de IU, Gaspar Llamazares, destacó que «se abre la puerta y el camino para la paz». En el mismo sentido habló el líder de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, quien consideró el anuncio como una «noticia histórica». También, el presidente de CiU, Artur Mas, expresó «casi una convicción de que Euskadi va a resolver su gran reto». Mientras, por EA, Begoña Lasagabaster exigió «prudencia y responsabilidad» ante la «puerta importantísima» que se abre.
