24 desaparecidos fueron presentados por el Ejército como guerrilleros muertos en combate
Así lo denunciaron autoridades de Antioquia y la ONU, que pidieron claridad sobre el caso, e informaron del hecho a la Vicepresidencia.
Un paramilitar desmovilizado del llamado ‘Héroes de Granada’, que el pasado 26 de febrero fue presentado por la Brigada IV como un miliciano del Eln muerto en un combate en la comuna 13 de Medellín, hace parte de la lista.
En todos los casos los muertos fueron presentados por los militares como dados de baja en combate en distintos lugares del departamento. Previamente, sus familias los habían reportado como desaparecidos.
La cantidad de denuncias llevó a la Gobernación de Antioquia, la Procuraduría, la Alcaldía y la Personería de Medellín, con la Oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, a pedir ayuda al Gobierno.
El 24 de abril se reunieron con el vicepresidente Francisco Santos, que designó un delegado para el tema.
Y el jueves pasado, durante una visita a Medellín, Carmen Rosa Villa, encargada de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos, se manifestó preocupada porque algunas autoridades militares “insisten en desconocer la situación”.
Lo cierto es que entre las víctimas no había un patrón común de militancia política o pertenencia a grupos sociales. Algunos eran campesinos que no regresaron después de que salieron a hacer diligencias entre un pueblo y otro.
Ramiro Oswaldo Agudelo, director de una entidad para rehabilitar drogadictos en Marinilla, por ejemplo, desapareció cuando viajaba entre Medellín y Guarne. Días más tarde apareció como un guerrillero dado de baja en combate.
“Era gente común y corriente”, asegura la Corporación Jurídica Libertad (CJL).
De acuerdo con esta ONG, los casos obedecerían a la “urgencia de los militares por mostrar resultados”.
El secretario de Gobierno de Antioquia, Jorge Mejía, dijo que si bien son las Farc, las Auc y el Eln los mayores infractores de derechos humanos en el departamento, la Gobernación sí está preocupada por la supuesta participación de miembros de la Fuerza Pública en los casos.
“Creemos que no es el Ejército como tal, sino algunos de sus miembros”, agregó.
Un vocero de la Séptima División, que agrupa las brigadas de Antioquia, Córdoba y Chocó, afirmó que conocen sobre las denuncias del año pasado y que “si hay casos aislados se investigarán”.
Mientras en todo el 2005 el Comité Institucional de Derechos Humanos y DIH de Antioquia conoció 32 casos parecidos a los de este año, entre enero y mayo de este año van 16 denuncias con 24 muertos.
MEDELLÍN
Alerta de la ONU sobre el tema
«Preocupan las ejecuciones presentadas como muertes en combate y las alteraciones de la escenas del crimen”.
Carmen Rosa Villa, delegada en Colombia de la Alta Comisionada para DH de la ONU.
‘Hay que esperar la investigación’
Entrevista con el General Luis Pico, comandante de la IV Brigada.
¿Qué responde a estas denuncias?
Del 2003, 2004 y 2005 hay unas 95 denuncias, pero es porque cada operación en la que hay combates y muertos origina investigaciones. Hemos tenido reuniones con Fiscalía, Procuraduría y Gobernación y se está verificando el estado de las investigaciones.
Pero hay 16 denuncias concretas sobre irregularidades…
No podemos hablar de 16 casos. Si hay alguno aislado la investigación lo determinará. Los familiares tienen derecho a decir lo que quieran y se imaginen.
¿Y los que desaparecen en el camino?
Eso no lo conozco. Si hay desapariciones forzadas sí sería una cosa muy crítica.
También hay denuncias por operaciones urbanas…
En las comunas de Medellín se están engendrando nuevas redes de milicias de las Farc y del Eln y ha habido combates.
¿Garantiza que en ningún caso está el Ejército?
De los casos que conozco puedo estar tranquilo. De los de este año hay que esperar.
Un sobreviviente denuncia que le dispararon
“El 15 de enero pasado iba para la vereda Santa Luisa, en Salgar, y tenía puesto un pantalón camuflado con el que me quedé después de prestar servicio. Me paró un cabo del Batallón Nutibara, me insultó y me lo hizo quitar. Se los entregué y me fui.
El 5 de febrero yo estaba en el pueblo (Salgar) y el mismo cabo estaba pidiendo papeles. Me quitó los míos y me llevó para el comando de Policía. Me metieron al calabozo. Pregunté por qué me tenían ahí y me contestaron que por ser de la zona debía acompañarlos a una operación en la vereda Santa Luisa, que eran órdenes de un coronel. A la 1:30 a.m. me dieron un camuflado y un fusil, me pusieron una pañoleta en la cara y salimos. Vi la cosa muy rara pero pensaba que el Ejército no me iba a hacer nada.
Mientras llegábamos, el cabo decía que él estaba mal de operaciones y si nos iba bien él se salvaba de que lo echaran. Pero como a las 4:00 a.m. me iluminó con un celular y le dijo a otro soldado ‘que le hiciera’. El soldado me disparó tres veces en el abdomen y yo me tiré hacia un cafetal. Logré llegar donde mi hermana que vive en esa vereda. Me trasladaron al hospital de Ciudad Bolívar y luego a Medellín, donde me operaron.
Mi hermana habló luego con el cabo y él le dijo que pensaba que yo era un guerrillero y por eso denunciamos. El caso está en la justicia militar”.
* Sobreviviente que pidió el anonimato.