Betancourt quiere ayudar a jóvenes colombianos a resistir a llamados de FARC
La ex rehén franco-colombiana Ingrid Betancourt indicó el lunes en Roma que el primer proyecto de su fundación será impedir que la guerrilla de las FARC reclute a jóvenes colombianos.
«Quiero sacar a mis antiguos compañeros de cautiverio de la selva» pero «curiosamente, también pienso en mis guardianes, de 13 ó 14 años de edad, más jóvenes que mis hijos, y ellos también son prisioneros de una ideología y del terror», declaró Ingrid Betancourt.
La ex rehén recibió de manos del presidente de la cámara de Diputados italiana, Gianfranco Fini, el premio «Peregrino de la paz», otorgado por el Centro Internacional para la Paz entre los Pueblos de Asís, ciudad del centro de Italia.
Betancourt indicó que el primer proyecto de la fundación que acaba de crear y que lleva su nombre, será desarrollado en el pueblo de Calamar, que funciona como un «centro de reclutamiento de las FARC» (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia).
«Aquellos que me vigilaban durante mi cautiverio venían de ese pueblo. Finalmente, he comprendido que no tenían otra alternativa», explicó Betancourt que fue rehén de las FARC durante seis años y medio, entre febrero de 2002 y julio de 2008.
En su opinión, las FARC reclutan gracias a «grandes mentiras sobre un futuro mejor» a jóvenes que se sienten atraídos por el hecho de tener un arma, pues ello les otorga «respeto y un estatus», precisó Betancourt.
«Se creará un espacio en los pueblos con asistentes sociales que acompañarán a los jóvenes en el logro de sus sueños. El proyecto quiere decirles que no necesitan matar o prostituirse, y que pueden hacer realidad sus sueños en la paz y en el respeto del otro».