Vidas breves, muertes violentas
Hoy los accidentes de tránsito son una de las preocupaciones centrales de la sociedad peruana. Este fenómeno preocupa desde hace varios años a las autoridades las cuales, revisando las estadísticas, poco han hecho.
Las autoridades cambian y los accidentes quedan, incluso observamos con impotencia cómo crecen en frecuencia y número cada año. Hoy lamentablemente se está haciendo frecuente en la ciudad que los protagonistas sean jóvenes que se incrustan en las frías estadísticas de la muerte sobre ruedas. A manera de ejemplo, las sanciones para quienes, habiendo consumido bebidas alcohólicas, chocan o atropellan matando o dejando mal herido a alguna persona, no tiene mayor sanción.
Hay impunidad y ello favorece a que estos delitos proliferen. Puedo dar fe de ello ya que tengo un ejemplo en mi propia familia. Hace dos años que el hijo de mi hermana de 20 años fue atropellado al cruzar una calle por otro joven que conducía a gran velocidad y en estado etílico, ni siquiera se detuvo para auxiliar a la victima. Días después, con una serie de investigaciones, el irresponsable chofer que era un joven de la misma edad y vecino de la zona, fue ubicado.
Mi sobrino, un destacado alumno de una universidad, desde hace dos años se encuentra en estado de coma en un hospital de la ciudad, y el que lo atropelló como su familia no quieren asumir ningún tipo de responsabilidad del acto criminal que cometieron, todo se ha resumido por la vía legal a esperar que la justicia imponga una sanción que consideren «justa».
Pregunto: ¿cuánto vale la vida en el Perú?, ¿por qué se protege tanto al infractor? La impunidad solo hará que prolifere este tipo de situaciones. Ya es hora de poner mano firme y dura para aquellos que irrespetan las leyes y normas de tránsito, al otro conductor o peatón, a las autoridades, a su propia vida y del prójimo, irrespetan también a la cordura y sensatez, pero lo hacen sabiendo que en el país a los que cometen esos excesos no les pasa nada.
Es algo curioso pero cierto un importante numero de personas cuando están frente a un volante se transforman y se creen los dueños de las pistas, hacen lo que quieren y es la ley de la selva la que predomina, su manejo es ofensivo y el siempre tendrá la razón.
Conducir un vehiculo conlleva a la responsabilidad individual y social de cuidar la vida en todas sus manifestaciones, para ello se han creado las leyes y normas de transito, que en la practica si se respetaran permitirían los acuerdos de convivencia para que todo fluya en forma normal.
Sin duda, adquirir la habilidad para conducir con seguridad es un desafió difícil, sobre todo en una ciudad como Lima, que tiene sus particularidades, como que el transporte publico es una verdadera amenaza por la forma de conducir: por las calles que son cerradas sin previo aviso, por tener semáforos malogrados, por peatones imprudentes, si a ello le sumamos que los jóvenes por lo general son adictos al riesgo, no miden la consecuencia de sus actos y son impetuosos al momento de conducir, al no tener mayor experiencia en conducir sumada al consumo de alcohol o drogas, manejar distraídos escuchando música a todo volumen o hablando por celular, han provocado ya muchas muertes, sobre todo los fines de semana.
Ese tipo de actitud al conducir pone en riesgo no solo sus vidas sino todo aquel que cruce en su camino. Cada año cientos de jóvenes mueren o quedan mal heridos producto de estos actos que son evitables en un 100%. El principal factor para que ocurran los accidentes de tránsito es la «irresponsabilidad», la imprudencia, como manejar habiendo bebido alcohol o a alta velocidad.
Es deber de los padres instruir a sus hijos sobre los peligros de manejar con imprudencia. A continuación, algunas recomendaciones generales que todos aquellos que conducimos deberíamos tomar en cuenta:
•Jamás tome bebidas alcohólicas ,drogas o medicinas que provoquen somnolencia si va a conducir
•Respete siempre las leyes y normas transito
•Siempre haga uso del cinturón de seguridad
•Maneje con prudencia no haga maniobras temerarias
•Enfóquese en el manejo, no se distraiga con la música a todo volumen, conversando o hablando por celular
•Siempre compruebe el buen estado de su vehiculo, revise llantas, frenos, dirección luces.
•Compruebe la vigencia de su SOAT
•Trate de no manejar adelantando a otros vehículos y si lo tiene que hacer que sea en forma adecuada
•No vaya rebasando los vehículos respete su carril
•Respete las señales de transito
•Evite distracciones o discusiones cuando maneje
•Siempre será mejor manejar a la defensiva
•Siga las recomendaciones de las autoridades de transito.
Finalmente, los invitamos a considerar los tips de seguridad mencionados y adoptarlos como hábitos al momento de conducir. Nuestro bienestar y el de las personas que nos rodean dependerá, en gran medida, de nuestra actitud frente a un timón