El Ejecutivo nacional rechazó una «nota verbal» que envió este martes el Gobierno de Estados Unidos, en la que insta a cerrar antes del 30 de septiembre la oficina de adquisiciones que tiene Venezuela en Miami y ratifica su decisión de «revocar las ventas de componentes y servicios militares» al país.
A través de un comunicado, la Cancillería se «permitió expresar» que «adoptarán responsablemente, pero sin nunguna vacilación, las medidas que sean necesarias», ampliando los proveedores que existen en el mercado internacional, pero advirtió que Washington «debe respetar los contratos y compras negociadas y acordadas legalmente».
«Exigimos a ese gobierno que permita el flujo de los suministros y artículos de defensa, que fueron pagados por nuestro país, antes del 17 de agosto de 2006 o en su defecto se reintegren esas erogaciones monetarias», refiere el escrito.
Para el Gobierno nacional, la medida de Estados Unidos «se inscribe en la reiterada y agresiva política que impulsa el imperialismo norteamericano contra Venezuela, basada en un escenario de conflicto de baja intensidad».
«Es, a todas luces, un nuevo acto de hostilidad destinado a ejercer una especie de bloqueo en el ámbito militar, que nuestro país rechaza con la mayor firmeza», puntualiza el Ministerio de Relaciones Exteriores.
La Cancillería recordó que el argumento empleado por el Departamento de Estado para suspender el suministro de material bélico es que Venezuela «no está cooperando con los esfuerzos antiterroristas de EEUU», afirmación que consideran «infundada».
Destacó que, por el contrario, es el actual Gobierno de EEUU el que «practica el terrorismo de Estado en el mundo y que la mayoría del pueblo norteamericano cuestiona». «Las invasiones a Irak y Afganistán son casos emblemáticos».
Además, reiteró que EEUU «avala y protege» al «connotado terrorista internacional Posada Carriles, con lo cual queda en evidencia la doble moral que practica». Aprovechó la ocasión para ratificar la solicitud de extradición de este ciudadano, procesado por la Justicia venezolana por la voladura de un avión cubano en 1976, que dejó 73 muertos.
Asimismo, la Cancillería rechazó la inclusión de Venezuela en un informe sobre países que no combaten adecuadamente el «tráfico de personas», campo en el que, según el comunicado, su comportamiento es ejemplar y ha sido reconocido por la Organización de Estados Americanos (OEA).
Aseguró el MRE que esta «actuación unilateral» e «inmoral» de Washington «pudiera conducir a sanciones de naturaleza militar contra Venezuela». «Esta decisión muestra claramente el uso indebido, por parte de EEUU, del tema de la trata de personas para lograr objetivos políticos deleznables», señaló.
Venezuela reiteró la disposición de Caracas a «mantener normales y constructivas relaciones diplomáticas con EEUU, basadas en el Derecho Internacional y en un respeto absoluto a la soberanía de nuestro país»._MDE