Debido al alto nivel de inseguridad, toda medida en materia de prevención de riesgo nos ayuda a vivir con menos aprensión, aliviando el estrés diario. Es una sensación gratificante estar tranquilos en nuestros hogares, lugar de trabajo y/o área social, con un sistema de alerta temprana ante cualquier intento de penetración, y si ocurre una eventualidad contar con la ayuda de personal entrenado para estos tipos de eventos.
Hemos observado que el índice de instalación de sistemas de alarmas y su monitoreo aumenta y las personas secuestrables son menos susceptibles a ello, ya que el grupo delictivo se dará cuenta de las dificultades y de los riesgos que se crearán al intentar penetrar en un recinto protegido.
En el trabajo se crea un clima de seguridad al emplear métodos de restricción, al controlar visualmente las operaciones y evitar intrusiones. Igualmente, los clientes y los proveedores se sentirán beneficiados por ese clima de seguridad. Se evitarán malestares que mermarán la capacidad de la gerencia en la conducción de la empresa, ya que se dedicarán a su trabajo y no a efectuar labores de vigilancia, detección y prevención de delitos.
Las restricciones eficientes basadas en políticas de seguridad podrían evitar un intento de secuestro, inclusive pueden ayudar a detectar un plan elaborado con complicidad interna al tener bajo control las actividades operacionales, o una actividad extraordinaria no planificada por la directiva de la empresa.
Las empresas donde no existen medidas de seguridad tienen problemas de hurtos menores, traspasos de información hacia la competencia, desvíos de dinero, atracos, pérdida de materiales y otra serie de irregularidades. Este clima de desconfianza puede llegar a niveles intolerables, mermando la capacidad de trabajo de la empresa.
Nuestra prevención debe apoyarse en la tecnología de seguridad basada en dispositivos electrónicos para:
a.- Prevenir, minimizar, controlar eventualidades.
b.- Notificar a otros en tiempo real de nuestra situación.
c.- Tener pruebas sobre el incidente.
d.- Detectar problemas de salud, conatos de incendio y otros.
Debemos ser proactivos y no reactivos. Generalmente se toman las medidas de seguridad después de haber sufrido algún incidente, sea de robo, hurto, incendio u otros siniestros. En vez de tomar las debidas preventivas, con lo que se propicia y favorece la siniestralidad